sábado. 20.04.2024

Otra ética

nuevatribuna.es | 26.01.2011Leía recientemente un artículo en el que se hacía una defensa cerrada sobre la importancia de que las grandes empresas incorporen a sus consejos de administración a personas de gran relevancia, y añadía: como Felipe González o José María Aznar.

nuevatribuna.es | 26.01.2011

Leía recientemente un artículo en el que se hacía una defensa cerrada sobre la importancia de que las grandes empresas incorporen a sus consejos de administración a personas de gran relevancia, y añadía: como Felipe González o José María Aznar.

Venía a señalar el articulista que disfrutar de los contactos de un ex presidente resulta muy importante para generar negocio, y que esto de incorporar a personas con “buena agenda” (las comillas son mías) debería ocurrir mucho más a menudo, porque si no se pierden estos formidables recursos humanos.

Bueno, es una manera de ver las cosas. A mí desde luego no me gusta, y no me gusta porque pienso que es utilizar las influencias y los conocimientos de una actividad pública para intermediar en la obtención de beneficios privados. Pero en fin, es el pan nuestro de cada día. Así que no insistiré mucho por esa vía. Soy de los que piensan que es la ética personal la que debe resolver ese tipo de “conflicto”, y ya ven ustedes que, o es muy laxa o simplemente está supeditada al volumen del beneficio a obtener. (Podemos observar múltiples casos a derecha e izquierda, en España o fuera, y a casi nadie parece inquietarle lo más mínimo).

Pero al menos, digo yo (por ejemplo en el chollo de los ex presidentes españoles con esos 80.000 euros del ala que se les asignan vía Presupuestos Generales del Estado) que para cobrarlos deberían estar supeditados al mantenimiento de ciertas incompatibilidades. Porque aun siendo discutible la cantidad, la indignación la provoca, especialmente, el hecho de que resulte compatible con los sueldos millonarios que cobran por el asesoramiento a empresas para influir en su expansión o lo que sea.

Una vez más los políticos establecen su bula particular. Lo hacen con las pensiones a cobrar y la necesidad de años cotizados, lo hacen con estos señores que pueden estar cobrando de todas las empresas que requieran sus servicios sin necesidad de renunciar a la pensión… ¿Dónde se ha visto esto entre el común de los mortales trabajadores?

Para que luego nos vengan con los cantos de sirena de que hay que apretarse el cinturón. Si acaso que se lo cuenten a José María Aznar con los 200.000 euros que cobra de Endesa tras su último fichaje a añadir a otros anteriores. O que se lo digan a Felipe González con los 126.000 euros que cobra de Gas Natural

Quizás sea pecar de malicioso si digo que al final lo que se están comprando son influencias y voluntades públicas, pero es lo que me parece.

Ah, y desde luego esta pareja de millonetis que dejen por favor de darnos lecciones y consejos a diario como si estuvieran por encima del bien y del mal. Yo al menos entiendo que debería caérseles la cara de vergüenza al hablar de la necesidad de recortes sociales desde su posición… A esta sociedad le sobran “predicadores” con pocos escrúpulos.

Dicen ahora desde el Congreso de los Diputados que van a revisar el escandaloso sistema de acceso a la pensión máxima que se diseñaron para si mismos hace un par de años. Bien, pues de paso que corrijan también este esperpento de que los ex presidentes no deban mantener ninguna incompatibilidad para cobrar su pensión de 80.000 euros, que no es cualquier cosa. Y si estos quieren “trabajar” para empresas privadas que tan generosamente les retribuyen, pues que simplemente renuncien a la pensión pública que les pagamos entre todos.

Martín Landa | Sindicalista

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