miércoles. 24.04.2024

A modo de análisis, balance y perspectivas

¿Tendrán las izquierdas barcelonesas la cordura, el talante y la capacidad de diálogo que hay que auto-exigirse?

Casi siempre hacemos análisis a la luz de las declaraciones en prensa, de las apariencias y de la inmediatez. Nada más alejado del método científico basado en la observación de la realidad existente, y no de una realidad virtual, la que nos va bien, o que queremos que sea, porque las conclusiones pueden llevarnos a despeñarse a 200 por hora y una castaña a estas velocidades puede ser mortal de necesidad.

Vaya por delante que un servidor está contento por lo ocurrido en Barcelona. Que mi ciudad vuelva a tener la posibilidad de ser gobernada por las izquierdas, que el mandato de Trias haya sido un paréntesis desde los años 20 (la derecha no había gobernado esta ciudad en elecciones libres y democráticas desde entonces) y que se pueda conformar una alianza entre las izquierdas plurales "me Pone", que se dice coloquialmente. Ahora bien: ¿tendrán las izquierdas barcelonesas la cordura, el talante y la capacidad de diálogo que hay que auto-exigirse? Porque si no es así, nos puede ir mal. Que nadie piense que CiU está muerta, ha sido el primer partido en Cataluña, es verdad que con pérdida de votos y concejales, y además, ya han mostrado su voluntad de recuperar la capital de Cataluña. Dicho de otro modo, no podemos pretender que una ciudad como Barcelona se pueda gobernar con una minoría mayoritaria de 11 concejales, no podemos caer en hacer ingobernable nuestra ciudad. ¿Es bueno anunciar medidas sin antes haber hablado con todo el mundo, sobre todo con las izquierdas?

Barcelona tiene 11 concejales de BC, 10 de CiU, 5 de ERC, 5 de Ciudadanos, 4 del PSC, 3 del PP y 3 de la CUP. Esto quiere decir que la candidatura ganadora queda a 10 de la mayoría, que CiU pierde apoyos, pero es mayoritaria en 4 distritos de Barcelona, ​​que Esquerra no cumple las expectativas tras las europeas donde fueron el primer partido de la ciudad, que Ciudadanos se come parte del espacio del PP, que el PSC por influencia en beneficio de BC, que el PP queda subalterno a los Ciudadanos (en la ciudad) y que la CUP irrumpe con fuerza a la institución y gana en presencia, militancia y organización .

La candidatura ganadora se presenta como una confluencia, es decir, hay partidos de los nuevos y de los refundados, hay movimientos políticos que más que un programa han acordado una presencia plural en una lista. No es un frente popular ni una unidad de las izquierdas porque faltan componentes y tradiciones importantes. CiU no es capaz de aglutinar ninguna mayoría en torno suyo y no tiene un balance propio de ciudad, ERC queda como aquello de "ni contigo ni sin ti", han hecho una candidatura pensando en clave interna y no en los electores potenciales que tenía, Ciudadanos emerge como la fuerza españolista y populista que es, liderada por una persona que ya hace años que se diputada (primero del PP), los socialistas se meten la castaña del siglo, han quedado invisibilizados y no han sido capaces de explicar su proyecto, a pesar de las buenas maneras del candidato. Seguramente la falta de relación con el tejido asociativo de la ciudad, con la gente de los diferentes barrios, la lejanía del proyecto en relación a las necesidades más urgentes de la población, mezclado con las crisis repetidas y la situación en el interno, no sólo del PSC, también del PSOE y su alineamiento con el españolismo rancio les ha pasado factura. El PP está en caída libre y la CUP, para mí son la verdadera revelación, porque crecen cualitativa y cuantitativamente.

Más allá del voluntarismo, hay que analizar cuáles son las finanzas de la ciudad, qué recursos hay para hacer políticas en beneficio de la ciudadanía. El primer obstáculo que nos encontramos lo tenemos en las leyes de régimen local aprobadas, que son un auténtico Decreto de Nueva Planta para el siglo XXI; privar de la capacidad de endeudamiento a los ayuntamientos, colocar los recursos en manos de las Diputaciones (instituciones donde no hay democracia directa, no son escogidas directamente), herederas de una distribución territorial fuertemente centralista y jerárquica fue la jugada del PP contra las políticas de proximidad de los ayuntamientos, y además un torpedo en la línea de flotación de las reivindicaciones nacionales en Cataluña. Y este ha sido un tema en el que nadie, ninguna formación política ha denunciado ni ha combatido como corresponde: unos entretenidos en colgar y descolgar banderas, los otros con esto de la "nueva política", y el resto en off-side ... muy mal, amigos, muy mal.

Por ejemplo, se han anunciado una serie de medidas en Barcelona por parte de la cabeza de lista de la lista más votada, que no discuto, que me parecen justas la mayoría. Mi pregunta es si solo con el ahorro procedente de dietas, coches oficiales y reducción del número y complementos salariales de los altos cargos es suficiente. Porque si además no nos podemos endeudar, si no hay diálogo con el otro lado de la Plaza St. Jaume para que devuelva los préstamos, convendréis conmigo en que la situación puede ser difícil, casi de emergencia. Estos pasos, no se pueden afrontar sin una alianza política y social. ¿Se está en disposición de hacerla? Son dudas que tengo, desde el respeto a los resultados ya las candidaturas de las izquierdas, empezando por Barcelona en Común, siguiendo por ERC, PSC y con las CUP. Y también a las instituciones económicas y sociales de la ciudad, empezando por los interlocutores sociales. Sacar de la pobreza a muchos de los habitantes de Barcelona debe ser la prioridad y hay que buscar y sacar recursos de debajo de los adoquines si es necesario. Combatir las desigualdades debe estar en la agenda de todos, y para este objetivo será necesario luchar, cuantos más mejor, sin menospreciar a nadie ni nada. Es necesario, por tanto, dialogar con todos, partidos, interlocutores sociales, con el tejido asociativo de la ciudad y encontrar soluciones comunes, realizables y justas, o mejor, invirtiendo el orden. Improvisar o tirar propuestas irreales es el que menos se necesita ahora y hoy en Barcelona. Y luego hay que ver cuáles son las prioridades hoy: sacar a la gente de la situación de pobreza y generar actividad económica para mí son las prioridades más importantes. Habría que no pensar en equipamientos y obras que ahora no son posibles, terminar la línea 9 del Metro, que además de romper aislamientos de los barrios más populares con el resto, hará que haya una conexión más económica con el aeropuerto de Barcelona, ​​al nivel del resto de las capitales europeas.

Hay que ver además cual será el papel de la capital catalana en relación al proceso de cambio de relación con el estado español y sus instituciones. La necesidad de alcanzar en las manos de los ciudadanos de Cataluña los destinos de la nación catalana debe pasar indudablemente por Barcelona, ​​por su relación con el país, por sus conexiones y nexos internacionales y por su situación geopolítica.

En definitiva, hay tiempo hasta el día 13 de Junio, todo está por hacer y todo es posible.

Habrá una segunda parte, donde hablaremos de Madrid, del País Valenciano, de la situación en el estado y las comunidades autónomas donde ha habido elecciones y de la gran damnificada de todo esto: Izquierda Unida.

A modo de análisis, balance y perspectivas