viernes. 19.04.2024

La remodelación del Gobierno

NUEVATRIBUNA.ES - 24.10.2010Que el gobierno de Zapatero estaba contra las cuerdas era una evidencia.Que amplios sectores de la izquierda, susceptibles de votar socialista, andan muy revueltos y cabreados, tampoco es ningún secreto.
NUEVATRIBUNA.ES - 24.10.2010

Que el gobierno de Zapatero estaba contra las cuerdas era una evidencia.

Que amplios sectores de la izquierda, susceptibles de votar socialista, andan muy revueltos y cabreados, tampoco es ningún secreto.

Así pues, con esos datos y con los números que vienen reflejando las últimas encuestas, entre once y trece puntos por debajo del Partido Popular, a pesar de la pésima valoración de su líder Mariano Rajoy, estaba claro que en el PSOE se habían encendido todas las alarmas.

La remodelación amplia de gobierno efectuada por Zapatero -salen seis ministros y entran cuatro- sólo cabe interpretarla en la vía de intentar recuperar el afecto de sus potenciales votantes como premisa principal.

Quizás exista la idea de que un gobierno más político y de mayor consistencia pueda invertir la actual tendencia. Pero claro, el problema no es sólo el de explicar mejor lo que han venido haciendo y los verdaderos motivos por los que lo han hecho, que también. El fundamento principal de la desafección es la pérdida de credibilidad que se ha venido fraguando en torno al gobierno y a su principal activo: su presidente. Y eso exige también otras rectificaciones, no sólo cambios de ministros.

Para que los cambios resulten creíbles entre los sectores de izquierda descontentos con el giro copernicano de Zapatero y su gobierno, se debería empezar por desmontar totalmente el desaguisado del despido objetivo de la reforma laboral recién aprobada y determinados aspectos de la negociación colectiva, aunque tenga que ser a través del Reglamento de la Ley, todavía por aprobar.

Es asimismo necesario que el gobierno se vaya olvidando de elevar a 67 años la edad de jubilación de forma obligatoria…
De lo contrario la remodelación del gobierno efectuada será solo flor de un día.

Los sindicatos no tienen marcha atrás. La fiabilidad del gobierno está en estos temas bajo mínimos y tanto CCOO como UGT acaban de verle las orejas “al lobo” del descontento social y de los trabajadores para con el excesivo créditoque le han concedido a este gobierno.

Y desde Francia, paralelamente, está llegando todo un clamor popular basado en la tradición sindical de siempre: la negociación siempre debe estar basada en la movilización de los trabajadores.

Información, movilización y negociación.
Esas han sido las señas de identidad del movimiento sindical y hay que reconocer que por estos lares han estado demasiado tiempo dormidas.

El guiño de Zapatero con el nombramiento de Valeriano Gómez como ministro de trabajo me parece perfecto. Puede ser un buen punto de partida si sirve para iniciar la rectificación que se precisa.

Las huelgas generales tienen estas cosas la mayoría de las veces. Se tildan de fracaso…-bla, bla, bla- y al final tienen consecuencias. Pasó en el año 2002 con Aznar de presidente cuando, una vez acabada la juelga del 20-J cambió a seis ministros. Ahora, Zapatero repite. Porque más allá del seguimiento, del éxito o el fracaso de una huelga general, tiene otros muchos efectos añadidos en amplias capas de la sociedad. Respecto al 29-S, por ejemplo, cuando se preguntaba a la gente si creía que había motivos para la huelga general, más de un 70% contestaba que sí. Y eso es un activo que nadie va a poder obviar.

Ahora toca moverse y rectificar, o el cambio de gobierno será solo flor de un día.

Martín Landa - Sindicalista

La remodelación del Gobierno
Comentarios