miércoles. 24.04.2024

La justicia, el agua, el ajo y la resina

NUEVATRIBUNA.ES - 6.8.2009PARA
NUEVATRIBUNA.ES - 6.8.2009

PARA DIARIO DEL AIRE

A joderse, aguantarse y a resignarse, esto les ha dicho el presidente de la Diputación de Castellón a los socialistas después de que el Tribunal de Justicia de la Comunidad Valenciana (TSJCV), gracias a la amistad entre el presidente del mismo y Francisco Camps, exonerase a éste de un delito de cohecho mediante el correspondiente auto, muy celebrado por Rajoy y los vendedores de tila, según gracieta al uso de Mariano.

Como el propio Carlos Fabra tiene casos pendientes con la justicia, que dirimirá quizá aquel mismo tribunal, y acaba de descubrirse uno más de corrupción en Mallorca que salpica al Partido Popular, con cinco detenidos hasta ahora por presunta malversación de caudales públicos, cohecho y falsedad en la construcción de un polideportivo en Palma cuyo coste se infló en 45 millones, estoy convencido de que por una vez el señor Fabra lleva razón.

Pero me temo que se equivoca al orientar políticamente hacia el Partido Socialista el destino de sus palabras. Debemos recordar que antes de que el Tribunal de Justicia de la Comunidad Valenciana exonerase a Francisco Camps, presidente de aquella Comunidad, merced al concurso favorable de Juan Luis de la Rúa, que debería haberse abstenido en tal proceder, el presidente de la Comunidad de Valencia había dicho: Tendremos que buscar en el diccionario otra palabra distinta a la de amistad que resuma esta íntima y sentida relación entre De la Rúa y el presidente de la Generalitat.

No mintió en eso Camps, cuya carrera política probablemente haya quedado a merced de sus otras falacias. El presidente del TSJCV también fue muy explícito al referirse a esa relación, pues afirmó que se sentía feliz de la misma. En esta salsa se fue guisando el auto que ha hecho exclamar al señor Fabra el castizo dicho de su pueblo: Ajo, agua y resina.

¿Por qué será que después de haberle escuchado esto al presidente de la Diputación castellonense tengo la amarga certidumbre de que esas palabras me han llegado a joder, siento que he de aguantarlas y temo que he resignarme a creer que la justicia en este país sea la que celebra un político de su calaña, imputado por presunto tráfico de influencias y delito fiscal, que ha cuadruplicado además su patrimonio en sólo un lustro?

Félix Población es escritor y periodista del Centro Documental de la Memoria Histórica.

La justicia, el agua, el ajo y la resina
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