10 de agosto de 2010, 8:14
NUEVATRIBUNA.ES - 21.7.2010
...de cubanos para usarlas como lanza arrojadiza contra la política exterior del gobierno de España. Dicho ejercicio de propaganda restó protagonismo a los homenajeados: Herbin Hoyos y Ángel Gutiérrez. Justamente galardonados.
El equipo de Aguirre dedicó seguramente más tiempo a la coreografía de la lideresa, que a su discurso previsible y vacío. La guía espiritual del gobierno de la Comunidad de Madrid utilizó todos los medios públicos posibles para darse autobombo, y seguir con su campaña de eterna aspirante a torear en plazas más prestigiosas.
Jueves tras jueves en las sesiones de la Asamblea suena la misma cansina cantinela. El estribillo de “la culpa es del gobierno de José Luis Rodríguez Zapatero”, sirve para responder a cualquier reclamo al Ejecutivo regional sobre materias de empleo, educación, sanidad o vivienda.
En esta ocasión, la presidenta usurpó las responsabilidades de Gustavo de Arístegui, portavoz del Partido Popular en la comisión de exteriores; y Jorge Moragas, secretario de Relaciones Internacionales de su mismo partido. Aquirre hizo un llamamiento a no romper la posición común de la Unión Europea frente a Cuba y criticó las gestiones del Gobierno español en los excarcelamientos de presos, ensalzando a las damas de Blanco y al ex poeta Raúl Rivero. “Cuba volverá a ser libre”, afirmó. Es decir, la libertad a juicio de la presidenta se enmarca en una dictadura como la de Fulgencio Batista. Siempre la vuelta al pasado.
No es nada nueva la tolerancia de la presidenta hacia los gobiernos totalitarios. En la Asamblea ha expuesto los mismos argumentos que los educadores franquistas para justificar el alzamiento militar contra la II República Española. Y en su discurso del martes, no hizo referencias a Francisco Franco, a pesar de que el galardonado Angel Gutiérrez, un niño de la guerra a quien se le otorgó el premio a la tolerancia, lo fue por haber tenido que exiliarse a Rusia a los seis años de edad. A Aguirre le duele condenar el franquismo. ¿Por qué será?
Propaganda pública
Desde que alcanzó la presidencia, el dinero de todos/as los y las madrileños/as se invierte en intentar presentar a la lideresa ante la opinión pública como un ser liberal, bondadoso y demócrata donde los haya. La tarea es harto complicada… y costosa. Casi 7 millones euros se sacaron de las arcas públicas madrileñas el pasado año para financiar asociaciones y proyectos de migrantes afines.
También para disfrazar a la presidenta de demócrata. Nada mejor que obcecarse con Cuba, una vez que se ha acabado la guerra fría… Es el enemigo con el que confrontar para autoproclamarse como la mesías que llevará a la isla al edén. En su particular visión sobre la Democracia en Cuba, el gobierno regional no ha dudado en entregar a la Asociación de Iberoaméricanos por la Libertad, un colectivo contrario al gobierno cubano y vinculado al partido Unión Liberal Cubana, 70.000 euros. Los sacó de la partida del presupuesto de inmigración para que organizasen “foros de debate y estudio de la realidad y actualidad iberoamericanas”. En 2008 recibieron otros 79.000 euros.
Y como sucede con las partidas que se destinan a la cooperación bajo un criterio de indudable sectarismo en la Comunidad de Madrid -como muchas veces ha denunciado el grupo socialista- se ofrecen cifras millonarias a grupos de dudosa reputación democrática. Es el caso de la Fundación Hispano Cubana, la cual ha recibido más de medio millón de euros pese a tratarse de una filial de grupos de la extrema derecha en Miami, sobre los que pesan acciones terroristas.
Por todo ello, tratar de humanizar a Esperanza Aguirre es como pedirle peras al olmo. Es una inversión ímproba e improductiva.
Felicidades a Herbin Hoyos y a Ángel Gutiérrez.
Yolanda Villavicencio M. es diputada Socialista Asamblea de Madrid. Es licenciada en Económicas y Ciencias Empresariales, especialista en Cooperación Internacional al Desarrollo, especialista en Mujer y Desarrollo, máster en Migraciones y Relaciones Intracomunitarias y en los últimos ocho años ha dirigido la entidad AESCO, especializada en migraciones, cooperación al desarrollo y codesarrollo.
...de cubanos para usarlas como lanza arrojadiza contra la política exterior del gobierno de España. Dicho ejercicio de propaganda restó protagonismo a los homenajeados: Herbin Hoyos y Ángel Gutiérrez. Justamente galardonados.
El equipo de Aguirre dedicó seguramente más tiempo a la coreografía de la lideresa, que a su discurso previsible y vacío. La guía espiritual del gobierno de la Comunidad de Madrid utilizó todos los medios públicos posibles para darse autobombo, y seguir con su campaña de eterna aspirante a torear en plazas más prestigiosas.
Jueves tras jueves en las sesiones de la Asamblea suena la misma cansina cantinela. El estribillo de “la culpa es del gobierno de José Luis Rodríguez Zapatero”, sirve para responder a cualquier reclamo al Ejecutivo regional sobre materias de empleo, educación, sanidad o vivienda.
En esta ocasión, la presidenta usurpó las responsabilidades de Gustavo de Arístegui, portavoz del Partido Popular en la comisión de exteriores; y Jorge Moragas, secretario de Relaciones Internacionales de su mismo partido. Aquirre hizo un llamamiento a no romper la posición común de la Unión Europea frente a Cuba y criticó las gestiones del Gobierno español en los excarcelamientos de presos, ensalzando a las damas de Blanco y al ex poeta Raúl Rivero. “Cuba volverá a ser libre”, afirmó. Es decir, la libertad a juicio de la presidenta se enmarca en una dictadura como la de Fulgencio Batista. Siempre la vuelta al pasado.
No es nada nueva la tolerancia de la presidenta hacia los gobiernos totalitarios. En la Asamblea ha expuesto los mismos argumentos que los educadores franquistas para justificar el alzamiento militar contra la II República Española. Y en su discurso del martes, no hizo referencias a Francisco Franco, a pesar de que el galardonado Angel Gutiérrez, un niño de la guerra a quien se le otorgó el premio a la tolerancia, lo fue por haber tenido que exiliarse a Rusia a los seis años de edad. A Aguirre le duele condenar el franquismo. ¿Por qué será?
Propaganda pública
Desde que alcanzó la presidencia, el dinero de todos/as los y las madrileños/as se invierte en intentar presentar a la lideresa ante la opinión pública como un ser liberal, bondadoso y demócrata donde los haya. La tarea es harto complicada… y costosa. Casi 7 millones euros se sacaron de las arcas públicas madrileñas el pasado año para financiar asociaciones y proyectos de migrantes afines.
También para disfrazar a la presidenta de demócrata. Nada mejor que obcecarse con Cuba, una vez que se ha acabado la guerra fría… Es el enemigo con el que confrontar para autoproclamarse como la mesías que llevará a la isla al edén. En su particular visión sobre la Democracia en Cuba, el gobierno regional no ha dudado en entregar a la Asociación de Iberoaméricanos por la Libertad, un colectivo contrario al gobierno cubano y vinculado al partido Unión Liberal Cubana, 70.000 euros. Los sacó de la partida del presupuesto de inmigración para que organizasen “foros de debate y estudio de la realidad y actualidad iberoamericanas”. En 2008 recibieron otros 79.000 euros.
Y como sucede con las partidas que se destinan a la cooperación bajo un criterio de indudable sectarismo en la Comunidad de Madrid -como muchas veces ha denunciado el grupo socialista- se ofrecen cifras millonarias a grupos de dudosa reputación democrática. Es el caso de la Fundación Hispano Cubana, la cual ha recibido más de medio millón de euros pese a tratarse de una filial de grupos de la extrema derecha en Miami, sobre los que pesan acciones terroristas.
Por todo ello, tratar de humanizar a Esperanza Aguirre es como pedirle peras al olmo. Es una inversión ímproba e improductiva.
Felicidades a Herbin Hoyos y a Ángel Gutiérrez.
Yolanda Villavicencio M. es diputada Socialista Asamblea de Madrid. Es licenciada en Económicas y Ciencias Empresariales, especialista en Cooperación Internacional al Desarrollo, especialista en Mujer y Desarrollo, máster en Migraciones y Relaciones Intracomunitarias y en los últimos ocho años ha dirigido la entidad AESCO, especializada en migraciones, cooperación al desarrollo y codesarrollo.