jueves. 28.03.2024

A la altura de las circunstancias

¿Qué quieren que les diga? Desde estas páginas hemos defendido que son los agentes sociales los que mejor han sabido estar a la altura de las circunstancias que decía don Antonio Machado. La reunión que han mantenido con José Luis Rodríguez Zapatero, parece confirmarlo. Y no sólo eso. Son los agentes sociales los que más pegados han estado a la realidad y los que han mostrado mayor generosidad a la hora de abordar la solución de los problemas.
¿Qué quieren que les diga? Desde estas páginas hemos defendido que son los agentes sociales los que mejor han sabido estar a la altura de las circunstancias que decía don Antonio Machado. La reunión que han mantenido con José Luis Rodríguez Zapatero, parece confirmarlo. Y no sólo eso. Son los agentes sociales los que más pegados han estado a la realidad y los que han mostrado mayor generosidad a la hora de abordar la solución de los problemas.

Hubiera sido fácil que sindicatos y patronal se subieran al carro de la crispación y echaran las patas por alto, en la seguridad de que sus bases nada iban a reprocharles por iniciar una estrategia de acoso al Gobierno, de protesta fácil, apoyados en una situación económica angustiosa.

No ha sido así. Y el documento, que se puede leer íntegro en Nueva Tribuna, es un buen ejemplo de prudencia y, a la vez, de firmeza. El Gobierno de José Luis Rodríguez Zapatero �suponemos- habrá tomado buena nota de la disposición de los agentes sociales. Pero es un patrimonio que no puede dilapidar.

Al final, va a resultar que el ciudadano tendrá que pensar que sindicatos y empresarios son los que deberían pilotar la salida de la crisis. Una salida que ha de estar lejos de intereses políticos y de objetivos que poco tienen que ver con ideas nacionalistas o con repartos usurarios de los Presupuestos Generales. Lo que quieren los agentes sociales es que las cosas funcionen. Que en momentos de crisis funcionen �y bien- los servicios de empleo, la protección social o la formación. Aspectos todos que, a largo o medio plazo, redundará en beneficio de todos los ciudadanos.

Y en estos casos conviene recordar que la afiliación real de los sindicatos o de las organizaciones empresariales �a las que tanto se agarran algunos para quitarles capacidad- tiene muy poco que ver con la realidad y, sobre todo, con la efectividad de la firma de un acuerdo. Las organizaciones obreras y patronales no trabajan sólo con la vista puesta en sus afiliados. Tienen una visión más global y saben, mejor que nadie, que ésta es una aventura colectiva en la que o nos salvamos todos o no se salva nadie.

Es hoy una buena noticia que los agentes sociales hayan ido con ánimo constructivo ala reunión de Moncloa. Dispuestos a aceptar no sólo sus propios intereses, sino preparados para asumir un documento que, partiendo de la realidad, sea la base del futuro. Que la CEOE haya aceptado el documento , “aunque no recoja todas sus reivindicaciones”, y que las centrales obreras miren más allá del salario puro y duro, demuestra, como escribimos más arriba, que hay una madurez y un sentido de Estado digno de destacar.


Con José Ángel Valente, digamos:

Aquí está el límite.

Ya nunca,
oscuros por la sombra bajo la noche sola,

podríamos volver.

Pero no cedas, baja
al antro donde

se envuelve en sombras la verdad.

Y bebe,
de bruces, como animal herido, bebe su tiniebla,

al fin.


Que nada envuelva en sombras la verdad para poder volver.

A la altura de las circunstancias
Comentarios