jueves. 28.03.2024
mayores

Próximos a iniciar la fase de desescalada, el momento en el que se espera que comiencen a ir apareciendo nuevas medidas que nos permitan adaptarnos a nuestra nueva realidad, es momento de analizar cómo va a tener que ser el cuidado de ancianos a domicilio en nuestro país, una vez la pandemia esté más controlada.

Convertidos en uno de los factores de riesgo más importantes, como consecuencia del importante impacto que ha tenido el coronavirus en este colectivo, las personas mayores son ahora uno de los principales focos de atención a la hora de planificar el desconfinamiento. No solo en España, sino a nivel mundial. Para documentarnos para este artículo, hablamos con Cuidadelia la agencia de cuidado de mayores a domicilio en Madrid, una empresa asistencial que hace de este servicio uno de sus estandartes.

El cuidado de ancianos durante la pandemia

Como ya hemos mencionado, las personas mayores se han convertido en uno de los colectivos en los que la enfermedad ha tenido una mayor incidencia. Especialmente todos aquellos que ya tenían de alguna patología previa.

El índice de mortalidad ha sido especialmente alto alrededor de todo el mundo. En China, el lugar en el que comenzó la pandemia, se situada en torno al 15%. En otros países, como es el caso de España, se estima que la letalidad asciende hasta el 17,9% en los pacientes mayores de 80 años. 

Esta situación ha provocado que tanto las familias como las personas que se encargan del cuidado de este colectivo a domicilio hayan tenido que extremar las precauciones. Tanto la OMS como los Centros de Control y la Prevención de Enfermedades, conscientes de la situación, han ido aconsejando a la población acerca de las diferentes medidas que se debían tomar con el objetivo de mantener a salvo a este colectivo, convertido en uno de los grandes grupos de riesgo a nivel mundial.  

En todas ellas, existe un denominador común: la higiene. Desde el lavado de manos de manera frecuente hasta las soluciones antibacteriales a base de alcohol. Un conjunto de medidas que han versado en torno a la necesidad de limpiar y desinfectar todos aquellos objetos que se necesitan tocar con frecuencia, como es el caso de los pomos de las puertas, por ejemplo. 

Pese a que el distanciamiento social ha sido una de las fórmulas más repetidas durante este periodo, no conviene confundirla con el aislamiento social. Por ello, la figura de los cuidadores a domicilio, como es el caso de los profesionales de Cuidadelia, han cobrado un especial protagonismo. Manteniendo en todo momento las necesidades en materia de seguridad, pero favoreciendo la inclusión social por parte de las personas mayores. 

Los buenos hábitos, como la alimentación saludable, el ejercicio diario adaptándonos al entorno y el descanso son tres de los principales ejes vertebradores que han consolidado la mayoría de las políticas de cuidado a los ancianos. 

El cuidado de personas mayores después de la pandemia

El cuidado de personas mayores debe cambiar y adaptarse a las nuevas fórmulas que se van a interiorizar en la sociedad. Siempre con el objetivo de poder garantizar la salud y la calidad de vida de nuestros mayores. Expertos de Cuidadelia afirman que la asistencia domiciliaria tiene que ser una de las claves sobre las que debe crecer esta nueva forma de cuidados.

Pese a que el cuidado de las personas mayores siempre ha estado muy vinculado al ámbito familiar, la realidad es que nos enfrentamos a un escenario en el que la interiorización de una serie de medidas de higiene y de prevención van a ser fundamentales con el objetivo de asegurar la calidad de vida de las personas mayores.

Lo relacionado con las consultas médicas es uno de los aspectos que prevé un gran cambio. Los centros de atención primaria deben despejarse al máximo, con el objetivo de no volver a saturar nuestro sistema sanitario. En este sentido, únicamente los profesionales encargados del cuidado de mayores a domicilio sabrán como actuar ante algunas de las situaciones más típicas por las que las personas mayores acuden al médico. Ofreciendo soluciones que facilitarán la descongestión de los centros primarios. 

La forma de relacionarse también cobrará una importancia vital. Las personas que se encarguen del cuidado de este grupo de riesgo tendrán que realizar una importante tarea en lo relacionado con la manera en cómo interaccionan con estas personas, primando al máximo lo relacionado con las cuestiones de higiene y de prevención e interiorizando esta serie de pautas al máximo. Por lo que su figura, va a comenzar a cobrar una importancia todavía mayor. 

El cuidado de los mayores se enfrenta a un escenario especialmente complejo durante los próximos meses, en el que los cambios van a ocupar un papel más que destacado. Interiorizar todos ellos y aplicarlos con el máximo respeto y profesionalidad, únicamente va a estar en manos de los profesionales mejor formados para la ocasión. 

El cuidado de los mayores durante y después del coronavirus