nuevatribuna.es
16 de agosto de 2010, 6:26
NUEVATRIBUNA.ES / AGENCIAS 13.08.2010
El sindicato UGT de Melilla ha negado las acusaciones de "maltrato y racismo" de las fuerzas policiales contra ciudadanos marroquíes, realizadas por el Ministerio de Exteriores magrebí y denunciado que el boicot comercial a la ciudad ha sido realizado "por extremista que tienen como única fin perturbar las buenas relaciones que existen entre España y Marruecos".
El sindicato expresó su total confianza y su apoyo a los miembros de los Cuerpos y Fuerzas de Seguridad que están prestando durante las 24 horas del día servicio en las fronteras de Melilla y defendió el respeto a la ley de los policías y guardias civiles que prestan su servicio en la frontera con el reino alauí.
Sobre las acusaciones que realiza el 'Comité para la Liberación de Ceuta y Melilla' y la 'Coordinadora de Asociaciones Civiles de Nador, éstas fueron rechazadas de plano por la organización que dirige Alonso Díaz: "Se trata de unos extremistas -dice UGT-, que son conocidos en Melilla y que sabedores de las repercusiones mediáticas que tienen este tipo de noticias en relación con nuestra ciudad, tienen como único objetivo perturbar las buenas relaciones que existen entre España y Marruecos".
Además, subraya que "en estos momentos de dificultad para quienes tienen la responsabilidad de vigilar y controlar las frontera, UGT quiere decirles, tanto a los miembros del Cuerpo Nacional de Policía como a la propia Guardia Civil, que sigan desempeñando su trabajo tal y como lo vienen haciendo hasta el día de hoy, con dedicación y respeto a las leyes españolas por las que nos regimos".
Por otra parte, UGT-Melilla ofrece su total colaboración a los sindicatos del Cuerpo Nacional de Policía y de la Guardia Civil, en la tarea de la defensa de los derechos de los trabajadores y trabajadoras de estos Cuerpos y de sus reivindicaciones.
"Con todo ello queremos transmitirles que no están solos, que a su lado está, como siempre lo ha estado la Unión General de Trabajadores de Melilla".
Por último, el sindicato sigue apostando por las buenas relaciones entre España y Marruecos y por que cada día se avance en la mejora de los tránsitos de nuestras fronteras, "algo que sabemos, no solo depende de España, sino también del propio Reino de Marruecos" y "ello es necesario porque a nuestra ciudad se trasladan diariamente miles de marroquíes, cientos y cientos a trabajar en diversos sectores de la ciudad, como empleadas de hogar, construcción etc. y también miles de estas personas a comprar productos en nuestra ciudad".
UN POLÉMICO CARTEL
Por otro lado, los policías destinados a la frontera de Melilla van a interponer una denuncia (que será presentada el próximo lunes por la mañana en los juzgados de Melilla) por un cartel situado en la frontera de Beni-Enzar donde se muestra a los agentes rodeados de manos ensangrentadas.
Así, el Sindicato Unificado de Policía (SUP) presentará una querella contra la Coordinadora de la Sociedad Civil del Norte de Marruecos y el Comité para la Liberación de Ceuta y Melilla por la colocación en el puesto fronterizo de Melilla de un cartel con un fotomontaje que se burla de las mujeres policías.
El cartel apareció ayer en la denominada tierra de nadie, entre los lados español y marroquí del paso de Beni-Enzar, junto con otras pancartas reivindicativas escritas en árabe y español que fueron colocadas por estas asociaciones marroquíes.
En declaraciones a Efe, el secretario general del SUP en Melilla, Julián Millán, ha explicado que en el fotomontaje aparecen las fotografías de ocho funcionarias de la Policía Nacional, una de ellas del departamento de Investigación, y también la imagen de un agente policial con las manos hacia arriba.
Estos nueve agentes trabajan en el servicio de fronteras y fueron fotografiados mientras desarrollaban su labor profesional por miembros de estas asociaciones desde la tierra de nadie.
El SUP presentó ayer un escrito a la Jefatura Superior de Policía para poner este hecho en conocimiento de las autoridades españolas, pero hoy ha decidido presentar ante la Justicia española una querella por injurias, calumnias y atentado contra el honor y el derecho a la propia imagen.
Millán ha dicho que el sindicato, en representación de los nueve agentes afectados, cuenta con su consentimiento expreso para reclamar amparo ante la Justicia española.
El sindicato UGT de Melilla ha negado las acusaciones de "maltrato y racismo" de las fuerzas policiales contra ciudadanos marroquíes, realizadas por el Ministerio de Exteriores magrebí y denunciado que el boicot comercial a la ciudad ha sido realizado "por extremista que tienen como única fin perturbar las buenas relaciones que existen entre España y Marruecos".
El sindicato expresó su total confianza y su apoyo a los miembros de los Cuerpos y Fuerzas de Seguridad que están prestando durante las 24 horas del día servicio en las fronteras de Melilla y defendió el respeto a la ley de los policías y guardias civiles que prestan su servicio en la frontera con el reino alauí.
Sobre las acusaciones que realiza el 'Comité para la Liberación de Ceuta y Melilla' y la 'Coordinadora de Asociaciones Civiles de Nador, éstas fueron rechazadas de plano por la organización que dirige Alonso Díaz: "Se trata de unos extremistas -dice UGT-, que son conocidos en Melilla y que sabedores de las repercusiones mediáticas que tienen este tipo de noticias en relación con nuestra ciudad, tienen como único objetivo perturbar las buenas relaciones que existen entre España y Marruecos".
Además, subraya que "en estos momentos de dificultad para quienes tienen la responsabilidad de vigilar y controlar las frontera, UGT quiere decirles, tanto a los miembros del Cuerpo Nacional de Policía como a la propia Guardia Civil, que sigan desempeñando su trabajo tal y como lo vienen haciendo hasta el día de hoy, con dedicación y respeto a las leyes españolas por las que nos regimos".
Por otra parte, UGT-Melilla ofrece su total colaboración a los sindicatos del Cuerpo Nacional de Policía y de la Guardia Civil, en la tarea de la defensa de los derechos de los trabajadores y trabajadoras de estos Cuerpos y de sus reivindicaciones.
"Con todo ello queremos transmitirles que no están solos, que a su lado está, como siempre lo ha estado la Unión General de Trabajadores de Melilla".
Por último, el sindicato sigue apostando por las buenas relaciones entre España y Marruecos y por que cada día se avance en la mejora de los tránsitos de nuestras fronteras, "algo que sabemos, no solo depende de España, sino también del propio Reino de Marruecos" y "ello es necesario porque a nuestra ciudad se trasladan diariamente miles de marroquíes, cientos y cientos a trabajar en diversos sectores de la ciudad, como empleadas de hogar, construcción etc. y también miles de estas personas a comprar productos en nuestra ciudad".
UN POLÉMICO CARTEL
Por otro lado, los policías destinados a la frontera de Melilla van a interponer una denuncia (que será presentada el próximo lunes por la mañana en los juzgados de Melilla) por un cartel situado en la frontera de Beni-Enzar donde se muestra a los agentes rodeados de manos ensangrentadas.
Así, el Sindicato Unificado de Policía (SUP) presentará una querella contra la Coordinadora de la Sociedad Civil del Norte de Marruecos y el Comité para la Liberación de Ceuta y Melilla por la colocación en el puesto fronterizo de Melilla de un cartel con un fotomontaje que se burla de las mujeres policías.
El cartel apareció ayer en la denominada tierra de nadie, entre los lados español y marroquí del paso de Beni-Enzar, junto con otras pancartas reivindicativas escritas en árabe y español que fueron colocadas por estas asociaciones marroquíes.
En declaraciones a Efe, el secretario general del SUP en Melilla, Julián Millán, ha explicado que en el fotomontaje aparecen las fotografías de ocho funcionarias de la Policía Nacional, una de ellas del departamento de Investigación, y también la imagen de un agente policial con las manos hacia arriba.
Estos nueve agentes trabajan en el servicio de fronteras y fueron fotografiados mientras desarrollaban su labor profesional por miembros de estas asociaciones desde la tierra de nadie.
El SUP presentó ayer un escrito a la Jefatura Superior de Policía para poner este hecho en conocimiento de las autoridades españolas, pero hoy ha decidido presentar ante la Justicia española una querella por injurias, calumnias y atentado contra el honor y el derecho a la propia imagen.
Millán ha dicho que el sindicato, en representación de los nueve agentes afectados, cuenta con su consentimiento expreso para reclamar amparo ante la Justicia española.
