viernes. 19.04.2024

Rusia ha amenazado a periodistas extranjeros y a medios de comunicación propios con años de cárcel si dan informaciones contrarias a las oficiales que diga su gobierno. Cadenas de televisión han cerrado y otras se han marchado del país. RTVE y la agencia EFE han dejado Moscú con lo que nos vemos privados de tener una información propia y fidedigna de lo que allí ocurre.

Bruselas y los buscadores más usados a nivel internacional han cerrado la emisión de televisiones rusas y agencias que dan la visión oficial del Kremlin. En consecuencia nos vemos privados en países como España de conocer las informaciones desde el punto de vista de uno de los dos contendientes en la Guerra de Ucrania.

¿Realmente es esta la mejor forma de abordar la información de la guerra?

¿De verdad es posible impedir que las noticias y los diferentes enfoques lleguen a la opinión pública en la era de Internet?

La uniformidad en los mensajes que reciben los ciudadanos rusos es inaceptable. La unanimidad en el enfoque de la información en los medios públicos y privados españoles y europeos también. Si no se conocen los mensajes y propuestas de las partes contrarias difícilmente se podrá solucionar cualquier problema y en este caso una guerra cruel y despiadada que ya ha tenido miles de muertos y millones de desplazados.

Que Rusia bloquee medios de comunicación y redes sociales es censura, pero Europa también tiene un problema con la libertad de expresión.

La decisión de la Unión Europea de bloquear los medios Sputnik y Russia Today (RT) por su "desinformación dañina" ha puesto sobre la mesa el debate de hasta qué punto se está limitando la libertad de expresión. Un debate no solopolítico, ya que diferentes juristas apuntan que esta prohibición no es legal, ya que corresponde a los distintos países y no a la Unión Europea esta decisión de bloquear los medios de comunicación.

Desde Twitter a Telegram, todas las grandes plataformas cumplen con el bloqueo. Viendo Sputnik o RT era fácil darse cuenta que la mayoría de noticias se enfocaban desde un punto de vista similar al defendido por el gobierno de Vladimir Putin. Otras agencias oficiales como Novosty o Tass igualmente transmiten la posición oficial rusa.

Para intentar evitar que "la maquinaria mediática del Kremlin difunda sus mentiras", la presidenta de la Comisión Europea, Ursula von der Leyen, anunció esta medida, que días después entró en vigor al publicarse en el boletín oficial de la Unión Europea.

Monumento a la Libertad de Prensa | Cádiz | España | Imagen Emilio J.Rodríguez Posada  

Desde entonces, plataformas como Twitter, Youtube o Facebook han bloqueado las cuentas de Russia Today.

Facebook incluso ha dicho que rompe su tradicional veto a la violencia y va a permitir expresiones agresivas y de incitación a la guerra contra Rusia.

También lo han hecho otros operadores. E incluso Telegram, aplicación de mensajería de origen ruso que mantiene una política muy permisiva y con escaso control, ha decidido bloquear a los medios rusos.

"Las reglas son claras. No puede haber elusión. Todos los actores deben asumir sus responsabilidades. Primero, porque es la ley en la UE. En segundo lugar, todos han entendido lo que está en juego", asegura Věra Jourová, vicepresidenta de valores y transparencia de la Comisión Europea.

Bloquear la propaganda rusa es una medida "excepcional".

 "Lo intentaremos mantener lo menos posible pero tan largo como sea necesario. Debería ser una excepción única, pero hay una guerra", defiende la ministra holandesa Alexandra van Huffelen. Esta excepcionalidad ha quedado patente con la posición de varios políticos de distintos países, que expresaron su preocupación por la libertad de expresión y por las posibles contramedidas contra los periodistas de la Unión Europea en Rusia, que han acabado produciéndose. Sin embargo, "al final nadie quería defender una herramienta de propaganda rusa" y acabó aprobándose el bloqueo. 

Este debate ya se dió cuando Twiter decidió bloquear la cuenta de Donald Trump a raíz del asalto al Capitolio.

"Un acto de censura contraproducente" para el que no se tienen competencias. 

"Por primera vez en la historia moderna, los gobiernos de Europa occidental están prohibiendo medios de comunicación", han alertado desde la Federación Europea de Periodistas.

 "Conviene recordar que la regulación de los medios de comunicación no es competencia de la Unión Europea. Creemos que la UE no tiene derecho a otorgar o retirar licencias de transmisión. Esta es una competencia exclusiva de los estados".

"Este acto de censura puede tener un efecto totalmente contraproducente para los ciudadanos que siguen los medios prohibidos. En nuestra opinión, siempre es mejor contrarrestar la desinformación denunciando sus errores fácticos o mal periodismo, demostrando su falta de independencia financiera u operativa, destacando su lealtad a los intereses gubernamentales y su desprecio por el interés público", explica Ricardo Gutiérrez, de la organización europea de periodistas.

Una vaga prohibición de dudosa legalidad.

El jurista Joan Barata, experto internacional en materia de libertad de expresión y miembro de la Plataforma por la Libertad de Información (PLI), explica que estas decisiones "deben ser tomadas por el regulador del país de origen" y que "no pueden basarse en una evaluación general de los contenidos, sino en infracciones específicas". Es decir, además de tener que ser Francia, España o Alemania quienes establezcan el bloqueo, también debería ser revisado el contenido caso por caso y no un bloqueo general a todo el medio.

Según el experto: "las restricciones de la libertad de expresión deben estar basadas en los principios de legalidad, legitimidad y proporcionalidad. Ninguno de ellos están adecuadamente justificados en esta vaga prohibición de la Comisión Europea". El caso de RT es particularmente complejo porque "la propia estructura y funcionamiento de RT lo convierte en un excepcional y muy sofisticado instrumento de manipulación de la opinión pública", apunta Barata.

La Unión Europea sí permite a RT y Sputnik realizar investigación y entrevistas. 

La aplicación del bloqueo es delicado, porque se ven afectados derechos fundamentales como la libertad de expresión e información o el derecho a la libertad de empresa.

La Comisión Europea lo reconoce en su texto y por ello prohíbe la difusión de noticias pero no impide que estos medios de comunicación rusos puedan realizar investigación o entrevistas.

La mayoría de los trabajadores de Rusia Today despedidos

El canal ruso Russia Today (RT) ha anunciado que cesará las emisiones y despedirá a la mayoría de su personal según ha informado T&R Productions, la productora detrás del medio de comunicación financiado por el Gobierno de Rusia.

"Desafortunadamente, anticipamos que este despido será permanente, lo que significa que esto resultará en la terminación permanente del empleo de la mayoría de los empleados de T&R en todas las ubicaciones", ha anunciado Misha Solodovnikov, su gerente general, según informaciones de la cadena estadounidense CNN.

Una medida que han ejecutado después de que los países europeos suspendieran las emisiones en Europa de la agencia rusa Sputnik y RT, a las que acusan de ser instrumentos de desinformación del presidente ruso, Vladimir Putin.

Solodovnikov ha trasladado al personal que "cesaría la producción" en todas sus ubicaciones "como resultado de eventos imprevistos de interrupción del negocio". T&R Productions ha operado hasta ahora en las ciudades de Nueva York, Miami, Los Ángeles y Washington.

Suspensión en redes

Por otro lado, el equipo de Google Maps también deshabilitó la capa de tráfico en tiempo real en la zona de Ucrania para "proteger la seguridad de las personas que están allí", según informaron a Europa Press fuentes de la compañía tecnológica.

En tiempos de guerra la libertad de prensa y de expresión deben prevalecer