viernes. 29.03.2024

Soy terraplanista, no creo en la esfericidad de la Tierra, defiendo que es plana, levemente curvada hacia los extremos y creo que alguien trata de convencerme, como ya han hecho con  millones de personas, de que se puede circunvalar partiendo de un punto y regresar a él tras largo viaje ¿hay alguien que lo haya hecho? Yo no le conozco desde luego. A mí no me valen suposiciones ni magallanadas, yo quiero hechos tangibles.

Por eso mismo soy también negacionista ¿dónde están los virus? Yo no los veo, lo que si veo es una confabulación de los poderosos para para controlarnos mejor. Y ya te digo yo que con la vacuna te viene de regalo un “chis” para estar bajo control continuo, como las mascotas. Reniego también del cambio climático ¿hace calor? pues claro estamos en verano ¿Llueve? Algún día tenía que ser.

No amigo no, a mí no me vais a engañar, yo sé que el mundo está siendo manipulado por hordas extraterrestres que se apoyan en grupos de pederastas que se reúnen donde pueden, incluido los bajos de alguna pizzería, para definir cómo y cuándo acabar con la humanidad, empezando por la libertad de las personas. Ah, y por si no fuera suficiente, me consta que con aviones indetectables, que ahora reconoce la CIA, nos fumigan con partículas entontecedoras  para acabar con los espíritus resistentes, como yo mismo. 

Ya sé lo que estáis pensando, otro descerebrado haciendo proselitismo sin un pelo de rubor, otro cabezahueca irresponsable. Pues os digo que estáis muy equivocados, ¿Cómo no voy a profesar las creencias esotéricas que según vosotros me asisten? O sea que las vuestras están más justificadas y razonadas. Pues no lo veo y así. Lo que ocurre es que vosotros habéis ganado la guerra cultural que permite establecer un relato de las cosas tal como os conviene, pero ahora surge la  woke war, la guerra del despertar frente a las imposiciones progresistas, ilustradas y racionalistas. Pues dadme unas líneas que os voy a desmontar con cuatro cosas la soberbia de vuestras interpretaciones

Según vosotros la guerra fría tuvo un ganador, USA y un claro perdedor, la URSS, o sea lo que ahora es Rusia. Error quizá malintencionado, si así hubiera sido, Rusia no habría tenido capacidad para nombrar presidente de los USA a quien le pareciera. Y eso que les acabo pareciendo bien un tipo enfermo de ego, desequilibrado, pomposo y con más agujeros que un queso de gruyere. Pues lo hizo, con unas pocas artimañas informáticas logró colocar a su candidato en la Casa Blanca y a través de esta jugada maestra, crear franquicias en otros países y regiones.

Y ahora, para exorcizar mis contundentes verdades, diréis que de la guerra fría surgieron las potencialidades del estado de derecho actual, aquél que se rige por el imperio de la ley, que se define por la actuación de una entidad que se presenta con los ojos vendados para ejemplificar su neutralidad frente a las circunstancias de clase, género o raza, que defiende a cada quien en nuestras sociedades por lo que es, no por lo que tiene… ¡Díselo tú Juancar que a mí me da la risa! Vosotros creéis que lo que diga un grupito de sujetos, vestidos como se visten a veces, irresponsables de sus actos, pues para reforzar su actuación solo puede juzgárseles por la ley, y esta es interpretable y son ellos quienes lo hacen, éstos digo, van a crear las fortalezas que requieren nuestras sociedades. Pues yo no lo creo, más bien creo que son una banda de elegidos por tú ya sabes quién para favorecer los intereses de los ocultos. 

Y si no, porqué si fracasan o crean un problema social condenando medidas de asepsia sanitaria, se fuman un puro, nada les pasa, mantienen el salario  y el protocolo de honorabilidad que les asiste y protege. Los entrenadores de futbol por mucho menos se van a la calle. Y los periodistas de telemadrid, ni te cuento.

No me hables del estado de derecho como logro liberal surgido de la victoria de la democracia en la guerra fría. Menuda victoria, pero si después de cientos de horas de investigaciones e interrogatorios, todavía no saben quién es M. Rajoy. 

Con tal de ocultar que el dinero negro surgido aquí y allá ha servido para limpiar camisas azules, sois capaces de cualquier cosa. Hasta de enfrentaros a las más profundas esencias de lo místico (que es nuestro fuerte, el de los terraplanistas digo) Nos habéis mandado al anticristo en forma de papa gaucho para arremeter contra la vuelta a la verdadera comunión de las tradiciones en acto eucarístico, y va el pelotudo y prohíbe la misa en latín y de espaldas a la feligresía. Así cómo va a realizarse el prodigio de la fe, de la creencia por encima de la evidencia.

Es como si los ilusionistas exhibieran los secretos de su magia. O me vais a decir que la paloma que sale del sombrero no es un acto fascinante que nos deja a todos nosotros en el sitio que nos corresponde, la adoración y la aceptación de que las fuerzas que nos rigen están ocultas por eso que vosotros los hombres crédulos y de ciencia nos ponéis como muleta para desviar nuestra atención ¡Vamos ya, venirme con vacunitas a mí! Si ¡y la Tierra es redonda y está en peligro por nuestro desaforado consumo de carne!

Yo soy terraplanista