El Informe de fiscalización del Tribunal de Cuentas de RTVE correspondiente a los años 2010 y 2011 pone de manifiesto no sólo la solvencia del actual modelo de financiación, sino también la mejora de la gestión en relación con los anteriores informes de fiscalización de los años 96 a 99, y 2002-2004. El portavoz socialista en la Comisión Mixta de RTVE, Juan Luís Gordo, ha explicado que “los ejercicios 2010 y 2011, en un sentido estrictamente contable, presentan superávit en el presupuesto de explotación”. Ha añadido que “esta solvencia técnica y jurídica está avalada por la sentencia del Tribunal de Justicia Europeo sobre el modelo de financiación de la radio televisión pública francesa, modelo sobre el que se sustenta el nuestro”.
Juan Luis Gordo hizo estas afirmaciones este martes, en la Comisión Mixta del Tribunal de Cuentas en la que se trató del último Informe de fiscalización de RTVE del Tribunal de Cuentas, referente a los años 2010 y 2011, una reunión en la que ha indicado que el déficit estructural de cien millones de media en estos dos años se debe al “recorte desproporcionado del Estado, impuesto por el Gobierno del PP, del 50 por ciento en 2012, 2013 y 2014, con respecto a la media del 20 por ciento de las Administraciones Públicas”.
Ha subrayado también que “el Informe del Tribunal de Cuentas muestra una importante mejora en las cuentas de la Corporación”. En este sentido, ha señalado que “mejora con creces los aspectos auditados, sobre todo la gestión de los recursos humanos, respecto a los años del anterior Gobierno del PP”.
“Sorprende que el PP presente el Informe ante la opinión pública como un ‘gran desastre’, utilizando con fines políticos un órgano constitucional como es el Tribunal de Cuentas”, ha censurado.
Por todo ello, Gordo ha lamentado que “el único objetivo de Partido Popular, en este asunto, es crear una alarma social totalmente infundada, algo que mucho nos tememos seguirá haciendo”. Se ha referido además a que el Informe del Tribunal de Cuentas pone de manifiesto problemas en el proceso del control interno, aunque no son de gran entidad. “Hay que tener en cuenta que se encontraban ya presentes en el Informe de fiscalización de 1996 y 2000”.
Por otra parte, ha dicho que, “si bien el informe pone de manifiesto que las cuentas anuales de los ejercicios 2010 y 2011 merecen una opinión favorable, con salvedades de escasa relevancia cuantitativa y en la mayoría de los supuestos por una incorrecta periodificación contable, tanto en los ingresos como en los gastos, se constata que se viene aplicando el principio de caja, en lugar del de devengo”, ha dicho. Así, “por no aplicar el principio de devengo, los ejercicios 2010 y 2011 presentan un déficit de explotación de 47 y 29 millones, cuando debieran presentar un superávit de 10 y 20 millones, algo que no recoge el informe de fiscalización”, ha asegurado.
