Poker, cuestión de reacciones

Se podría decir que el boom del poker en los próximos años es una consecuencia directa de las dificultades económicas que experimentan gran parte de los españoles. Es decir, siempre procuramos encontrar vías alternativas para obtener unos ingresos extra, y juegos como el Texas Holdem son considerados juegos de azar, sí, por supuesto, pero de los que menos afecta la suerte y más la estrategia y el saber jugar.

Vemos pues que jugar al poker es una reacción a la crisis, pero ahora nos encontramos con que también el juego y las apuestas en España se encuentran en un estado crítico debido a la nueva normativa que los regula en el territorio español. Dichas leyes obligan al usuario a jugar sólo el dominios españoles y no internacionales o de otros países, pero además exigen declarar tanto los premios reales como los potenciales. Es decir, que se pagan impuestos tanto si se gana como si se podría haber ganado. Reacciones al respecto: las punto es deben agudizar su ingenio y ofrecer prestaciones que interesen a los jugadores que antes jugaban en salas internacionales, en las que encontraban jugadores desconocidos, y que ahora se ven obligados a competir contra sus propios compañeros. Los sistemas de puntos de jugador frecuente permiten ganar dinero más lentamente pero sin necesidad de apostar, un modelo más cauto pero fiable.

Algunos jugadores se rebelan y arriesgan a jugar en contra del sistema, pero realmente la única manera de estar tranquilo es adaptarse en la medida de lo posible a las nuevas normativas, variar nuestro estilo de juego y acomodarlo a nuestro propio beneficio. Muy importante será, claro está, prestar atención a la elección del casino online, asegurándonos de que lleven el logotipo de "juego seguro" y acogerse a las interesantes promociones que estas casas van lanzando para compensar la molestia de las nuevas leyes de regulación del juego y las apuestas en España.