El secretario general de UGT, Cándido Méndez, ha lamentado las detenciones a sindicalistas tras su participación en la huelga general del 29 de marzo, de las que ha dicho que recuerdan a lo que ocurría en España hace 50 años.
"No me gustaría llegar a la conclusión que se está pretendiendo amedrentar a la población", ha dicho Méndez, quien ha lamentado que se utilicen mecanismos prescindibles como detener a una persona en su lugar de trabajo o en su casa cuando se puede enviar una citación por escrito.
"No me gustaría llegar a la conclusión que se está pretendiendo amedrentar a la población", ha dicho Méndez
Méndez también ha recordado que estas situaciones se suman a "la amenaza" de cambiar el Código Penal para pedir responsabilidades a las organizaciones sindicales en caso de altercados o conductas irregulares de sus afiliados durante manifestaciones y convocatorias de huelga.
El secretario general de UGT, que ha afirmado que defenderán a sus representantes sindicales, ha instado a la sociedad a no permitir este tipo de decisiones que no tienen cabida en el marco jurídico español y arrojan una "sombra de sospecha" sobre la calidad y solidez del sistema democrático de España.
"Los problemas sociales que genera esta crisis no se tratan a golpe de cambio del código penal, sino que se tratan a golpe de políticas sociales y no de recortes", ha dicho el secretario general de UGT de Catalunya, Josep Maria Àlvarez, que ha reiterado que no deben ser los sindicatos los que den alternativas para evitar altercados, ya que se producen fuera de las movilizaciones sindicales y deben desvincularse de éstas.
Sin embargo, Àlvarez ha avanzado que han planteado a la conselleria de Interior de la Generalitat la posibilidad de trabajar de manera conjunta en la convocatoria de las movilizaciones para buscar colaboraciones.
