
Un grupo de médicos pediatras del área de salud que atiende a la población de la Cañada Real Galiana han hecho un llamamiento a las administraciones públicas para que se restablezca “de inmediato” el suministro de electricidad en los sectores V y VI del poblado.
Más de 4.000 vecinos, de los cuales casi la mitad son menores, llevan sin luz desde comienzos de octubre, una situación que se está agravando por la ola de frío polar derivada de la borrasca Filomena.
En un comunicado, los sanitarios alertan de que la privación de la luz está teniendo importantísimas consecuencias para la población de las zonas afectadas y que “pueden llegar a ser mucho más dramáticas si no se actúa con rapidez”.
Especialmente vulnerable es la población infantil de estos barrios por el “aislamiento y limitación de acceso a servicios”. Se está produciendo -según estos sanitarios- “una violación grave de los derechos de los niños”.
La falta de electricidad, y más en el contesto actual de digitalización de la enseñanza por la pandemia, impide seguir el ritmo de las clases, la oscuridad agrava los problemas sociales, el frío y la falta de luz paralizan e imposibilitan las tareas del día a día, conllevando además problemas de salud en ocasiones de gravedad. Estos problemas pueden derivar además de la combustión por los métodos alternativos de calefacción que se emplean en estas circunstancias. La conservación de alimentos y medicinas se ve también afectada, así como la higiene personal adecuada sin agua caliente, explican los médicos.
En el escrito, estos profesionales de la sanidad pública dicen entender la problemática de la lucha contra el narcotráfico y la importancia de establecer medidas efectivas, pero rechazan que esto sea a costa de la vulneración de los derechos de la población infantil a la que se está abandonando a su suerte.
“Devolver la luz es algo totalmente factible y fácil de llevar a cabo y debe ser una prioridad para la Comunidad de Madrid y en última instancia para el Gobierno central”, subrayan.
Firmantes de la carta