nuevatribuna.es
23 de septiembre de 2010, 13:25
NUEVATRIBUNA.ES / AGENCIAS - 23.9.2010
Tras salir a la luz la historia, la cónsul general de Guayaquil ha rectificado y le ha concedido la autorización rechazada el pasado día 7, según han confirmado fuentes del Ministerio de Asuntos Exteriores. Eso sí, se le exigirá el compromiso de regresar a Ecuador en cuanto su hijo se recupere. David Gregorio, que va a ser operado en los próximos días en el hospital de Cruces de Bilbao había denunciado que el consulado denegó la petición de su madre ante el riesgo de que se quedara en España de forma irregular, pero finalmente se ha revisado el caso por "razones humanitarias".
El joven ecuatoriano, que lleva ocho años en España y tiene residencia legal, había explicado horas antes a ABC que tenía miedo y solo quería que su madre estuviera junto a él en la intervención. Cuenta con un informe del hospital que explica los riesgos de la operación y con una carta de invitación policial expedida por la Brigada de Extranjería y Fronteras de la Policía Nacional de Bilbao. El abogado Javier Galparsoro, presidente de CEAR Euskadi, ya había presentado una queja formal al Defensor del Pueblo y había iniciado gestiones con la Dirección General de Asuntos Consulares del Ministerio de Exteriores.
Tras salir a la luz la historia, la cónsul general de Guayaquil ha rectificado y le ha concedido la autorización rechazada el pasado día 7, según han confirmado fuentes del Ministerio de Asuntos Exteriores. Eso sí, se le exigirá el compromiso de regresar a Ecuador en cuanto su hijo se recupere. David Gregorio, que va a ser operado en los próximos días en el hospital de Cruces de Bilbao había denunciado que el consulado denegó la petición de su madre ante el riesgo de que se quedara en España de forma irregular, pero finalmente se ha revisado el caso por "razones humanitarias".
El joven ecuatoriano, que lleva ocho años en España y tiene residencia legal, había explicado horas antes a ABC que tenía miedo y solo quería que su madre estuviera junto a él en la intervención. Cuenta con un informe del hospital que explica los riesgos de la operación y con una carta de invitación policial expedida por la Brigada de Extranjería y Fronteras de la Policía Nacional de Bilbao. El abogado Javier Galparsoro, presidente de CEAR Euskadi, ya había presentado una queja formal al Defensor del Pueblo y había iniciado gestiones con la Dirección General de Asuntos Consulares del Ministerio de Exteriores.
