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NUEVATRIBUNA.ES / AGENCIAS - 02.08.2009

El viento es determinante para el control del fuego en La Palma, donde entre 1.500 y 2.100 hectáreas de pinar es el balance inicial de superficie afectada por el incendio que desde la noche del viernes afecta a los municipios de Fuencaliente y Mazo. En la mañana de este domingo, un cambio de viento reavivó el fuego en Montes de Luna, según informa el diario Canarias7.

Tanto el frente este como el oeste permanecen sin controlar, aunque las condiciones del viento son más favorables que antes el fuego sigue siendo inestable.

Los dos puntos de lucha más importantes se centraron durante la noche en Jedey y en la pista del Cabrito, donde se concentran los esfuerzos de las brigadas forestales (BRIFOR) y de la Unidad Militar de Emergencias (UME).

El foco de Las Caletas y Los Canarios, en Fuencaliente, se encuentra estable y el frente "más peligroso" se sitúa en el foco del este, puesto que en el Barranco de El Cabrito el fuego está siendo de copa, lo que complica su ataque.

De las 4.000 personas evacuadas inicialmente, la mayoría de ellas pertenecientes a núcleo poblacionales de Fuencaliente, 115 permanecen en estos momentos en el acuartelamiento del fuerte de Breña Baja, puesto que el resto decidió alojarse con familiares o amigos en el resto de la isla. Asimismo, otro centenar de personas se encuentran alojadas en el hotel Princess Teneguia de Fuencaliente.

LLEGAN REFUERZOS

El Cabildo de La Palma espera que el fuego no llegue a núcleos de población, al incorporarse este domingo nuevos medios de extinción.

En las coladas volcánicas de Santa Cecilia, el flanco oeste de las llamas está siendo afrontado en la parte baja por un tendido de manguera de dos kilómetros, mientras que en la zona media éstas llegan sin virulencia y en la cota más alta aún no han alcanzado la zona de defensa, donde se encuentran los efectivos.

El Cabildo de La Palma indica, en una nota de prensa, que en estos momentos existe "cierto optimismo", ya que se espera que con los efectivos que se van a añadir en esta jornada se puedan mejorar las condiciones de este frente y aminorar el riesgo de que afecte a cualquier núcleo de población.

Hoy se destinarán a esa zona los medios de la BRIF y medios aéreos, mientras que la Unidad Militar de Emergencia (UME) y un grupo de voluntarios han estado realizando líneas de defensa y tendidos de manguera, para poder atacar las llamas de manera definitiva.

A los seis helicópteros que ya operaban ayer se incorporarán dos nuevos aviones anfibios del Ministerio de Medio Ambiente, así como, provenientes de la isla de Tenerife, dos retenes de Gesplan; dos de Tragsa; un técnico, dos retenes de la BRIFOR y un vehículo de extinción de incendio; un agente de Medio Ambiente y doce bomberos con tres vehículos contra incendios.

El viento reaviva las llamas y el fuego arrasa más de 1.500 hectáreas
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