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NUEVATRIBUNA.ES/AGENCIAS - 07.11.2010

El Papa Benedicto XVI ha lanzado un mensaje a favor de la vida como "sagrada e inviolable desde el momento de su concepción" en su homilía de la ceremonia de dedicación al culto del templo de la Sagrada Familia de Barcelona, en la que también ha defendido la institución del matrimonio católico.

Ante 6.500 fieles y autoridades, 1.100 concelebrantes y 800 cantores, el Pontífice ha pedido que "la natalidad sea dignificada, valorada y apoyada jurídica, social y legislativamente", en alusión a la reforma de la ley del aborto por el Gobierno de Zapatero, en vigor desde primeros de julio, que provocó tensiones entre el Vaticano y el Estado español.

El Pontífice ha pedido un apoyo "decidido" del Estado al hombre y la mujer que contraen matrimonio y forman una familia, aunque no ha hecho alusión al matrimonio entre homosexuales, otro de los puntos de fricción entre el Gobierno español y el Vaticano.

FEMINISTAS POR LA LIBERTAD SEXUAL

Más de doscientas personas convocadas por el colectivo de mujeres feministas anti Papa se han concentrado en la Plaza Universitat de Barcelona este domingo contra la visita de Benedicto XVI por "su injerencia" en las políticas sociales del país y defender la libertad sexual.

En declaraciones a los medios, su portavoz, Montse Pineda, ha lamentando esta injerencia de la jerarquía católica que afecta a los derechos sexuales de la mujer. Según ella, se ha llegado "al extremo" de querer rebajar "las expectativas" respecto a la ley del aborto.

Además, ha cargado contra la clase política, ya que ningún partido ha dado la cara "por la laicidad" de este país.

Los activistas han repartido preservativos entre los asistentes a la concentración y han lanzado consignas como: "Fuera los rosarios de nuestros ovarios"; "Apostasía con alegría"; o "Aborto libre y gratuito".

Esta pacífica protesta llega horas después de que el colectivo homosexual protagonizara una 'performance' al inicio del recorrido papal besándose en la boca como símbolo de oposición a la postura del Vaticano sobre la homosexualidad.

La visita del Papa a la capital catalana ha suscitado varias protestas de colectivos con sensibilidades diferentes como anarquistas, organizaciones homosexuales o feministas, que coinciden en pedir a la administración que no participe en exceso de los eventos.

Una primera protesta bajo el lema 'Yo no te espero' ya congregó a unas 2.500 personas el jueves, y este sábado el sindicato anarquista CGT se ha manifestado ante la Catedral de Barcelona, muy cercana al Palacio Arzobispal.

TENSIÓN ENTRE ACTIVISTAS HOMOSEXUALES Y JÓVENES CATÓLICOS

Más de un centenar de activistas homosexuales han protagonizado una protesta contra Benedicto XVI al inicio del recorrido del Papamóvil en la Avenida de la Catedral de Barcelona, y han acabado a gritos con los jóvenes católicos concentrados para recibir al Pontífide.

Los activistas se han besado al paso de la comitiva papal y han coreado consignas como 'Yo no te espero', 'La única iglesia que ilumina es la que arde', así como 'Bote, bote, bote, pederasta quien no bote'.

Los activistas han recibido los abucheos de las personas concentradas para ver al Papa, y los Mossos d'Esquadra han tenido que interponerse para evitar posibles altercados en los momentos de más tensión, lo que ha suscitado críticas de los presentes.

El líder del activismo homosexual catalán Jordi Petit ha asegurado que el suyo es "un acto de protesta pacífica con uso de la libertad de expresión para demostrar que el amor es igual dentro de todos los corazones". "Hemos recibido al Papa con un acto de amor reivindicativo", ha reiterado.

Ante una gran expectación mediática, parejas homosexuales de todas las edades se han besado y han criticado la postura del Papa sobre la libertad sexual. Según ha precisado Petit, lamentan el posicionamiento su posicionamiento hacia el divorcio y el uso del preservativo.

El Papa arremete en Barcelona contra el aborto y el matrimonio homosexual