No hay peligro de que el asteroide 2005 YU55, que pasará 'rozando' la Tierra el próximo 8 de noviembre, colisione contra el planeta, según ha señalado el astrofísico del planetario de Pamplona, Fernando Jáuregui. Así, ha aclarado que la única consecuencia de ese "encuentro" es un cambio de órbita del asteroide propiciado por la fuerza de gravedad de la Tierra.
"Los asteroides rodean el Sol y cada cierto tiempo coinciden con algún planeta, cada uno se desplaza en su órbita así que lo que ocurrirá el próximo martes es que se cruzarán y cada uno seguirá su camino", ha indicado.
En este sentido, ha apuntado que la "única consecuencia" que va a tener este episodio es que la gravedad de la Tierra "tirará del asteroide y modificará su órbita" ya sea "para alejarlo y que nunca más se le vuelva a ver o para acercarlo". Jáuregui ha explicado que esta "influencia" de la Tierra sobre 2005 YU55 se debe a la diferencia de tamaños. La Tierra tiene un diámetro de 13.000 kilómetros mientras que el asteroide tiene 400 metros.
El tamaño también es una de las razones por las que, "en caso de que ambos cuerpos colisionaran" las consecuencias en la Tierra no serían "una catástrofe". "Los asteroides que se considera que podrían provocar una catástrofe en la Tierra son los que tienen un diámetro superior al kilómetro".
El astrofísico ha indicado que los expertos "estudian sólo estos asteroides grandes" a los que "realizan un seguimiento" para calcular su recorrido. Así, ha señalado que los observatorios "sabrían con antelación si uno de estos cuerpos va a chocar contra la Tierra" con "un tiempo suficiente como para buscar una posible solución".
Sobre lanzar una nave o cohete que destruyera el asteroide en el espacio, Jáuregui ha apuntado que "nunca se ha hecho" y puede "que haya expertos que lo barajen como posibilidad" aunque ha asegurado que se trataría de un plan "que llevaría mucho tiempo planificar y que costaría mucho dinero".
2005 YU55 pasará a poco más de 324.000 kilómetros del planeta, es decir, a una distancia menor de la que se encuentra la Luna. De este modo, el astrofísico ha señalado que se podrá ver con telescopios convencionales.
SEGUIMIENTO DE LA NASA
Por su parte, la NASA ha anunciado que está realizando un seguimiento del asteroide desde una red de radiotelescopios situados en Goldstone (California) y desde el radar de Arecibo (Puerto Rico). Sin embargo, la agencia ha aclarado que la "misión", que comenzó el pasado 4 de noviembre y terminará el 10 de noviembre, no tiene nada que ver con la "peligrosidad" del suceso, sino que los expertos aprovecharán la cercanía del cuerpo rocoso para estudiar su composición.
La órbita del asteroide 2005 YU55 le hace pasar cerca de la Tierra, Venus y Marte, sin embargo, este encuentro es el más cercano que esta roca espacial ha protagonizado en los últimos 200 años, ha asegurado la NASA. Los científicos han explicado que la última vez que un asteroide de este tamaño se acercó tanto a la Tierra fue en 1976.