sábado. 20.04.2024
EL GOBIERNO DE CIFUENTES CONOCE LA SITUACIóN

Denuncian trato vejatorio en una residencia de ancianos de la Comunidad de Madrid

Los recortes de plantilla llevados a cabo por la empresa que gestiona el centro repercuten en la higiene y bienestar de los internos. El caso más grave ha sido el de un anciano que ha sufrido quemaduras de segundo grado sin que nadie acudiera a socorrerle.

moscatelares

“A los trabajadores que denunciamos la precariedad nos ponen los peores trabajos, las plantas más duras, los peores turnos, nos sancionan constantemente”, explican a este periódico

La residencia Moscatelares, situada en San Sebastián de los Reyes en Madrid, está en una situación crítica derivada de los recortes llevados a cabo por la empresa privada que gestiona el servicio, Albertia. Así lo vienen denunciando varios trabajadores del centro que han puesto en conocimiento de los grupos municipales del ayuntamiento estos hechos, conocidos también por el Gobierno de Cristina Cifuentes que sigue sin tomar cartas en el asunto.

La residencia pertenece a la Comunidad de Madrid pero es de gestión privada. Hace 8 años se inauguró y la empresa Asispa comenzó a gestionarla. En febrero de 2015, después de salir a concurso, la Comunidad de Madrid cedió la gestión a la empresa Albertia ya que era a la que menos había que pagarle por su gestión. Esta empresa gestiona en total 5 residencias en Madrid, dos de ellas públicas: Moscatelares y otra ubicada en Majadahonda; y otras dos en Zaragoza.

La primera medida que tomó la nueva empresa fue despedir a la directora y gobernanta. Para ocupar el puesto de gobernanta y jefa de planta pusieron a la presidenta del comité de empresa y a su segunda, ambas del sindicato CTA, “bloqueando el acceso a reclamaciones laborales a la empresa pues ellas firman como dirección y como comité de empresa”, señalan las mismas fuentes.

Los trabajadores tienen “miedo” de denunciar la lamentable situación en la que se encuentran los ancianos.  Los recortes van desde el personal de auxiliares, hasta el de limpieza, horas de médicos, enfermería, lavandería… El personal no da abasto con tantos residentes (el centro cuenta con 180 plazas). “La actual dirección no se preocupa por la higiene y bienestar de los abuelos. Hay trabajadoras que no les afeitan, no les duchan, no les cambian el pañal en todo el turno de 8 horas y ellos lo saben y no toman medidas”, señalan algunos trabajadores que prefieren guardar el anonimato. 

El caso más grave se ha producido hace unos días, cuando un anciano fue levantado las 6 de la mañana por el turno de noche (este turno nunca levantaba residentes pero los de la mañana no podían atender a todos) y sufrió una caída en el baño de la habitación; hasta la 12 de la mañana nadie fue a auxiliarle, nadie preguntó porqué había faltado al desayuno. El anciano se había caído junto a un radiador y no podía moverse lo que le provocó quemaduras de segundo grado en la mitad de la cabeza.

“A los trabajadores que denunciamos la precariedad nos ponen los peores trabajos, las plantas más duras, los peores turnos, nos sancionan constantemente”, explican a este periódico. La empresa alega que cumple con el pliego de condiciones y el Gobierno de la Comunidad asegura que, después de varias inspecciones, todo está bien. Pero los trabajadores que denuncian esta situación afirman que la CAM está haciendo la vista gorda ante estas negligencias y los que denuncian se exponen a perder su puesto de trabajo. Una trabajadora está sancionada de empleo y sueldo por escribir a Izquierda independiente (grupo municipal que está denunciando los hechos). Recientemente, una delegación de la CAM visitó el centro y la diputada socialista en la Asamblea de Madrid, Pilar Sánchez Acera, se ha comprometido a llevarlo al pleno del parlamento regional. Pero el tiempo corre y la situación es cada día más lamentable para los ancianos, muchos de ellos sin familiares que velen por sus derechos. 

Denuncian trato vejatorio en una residencia de ancianos de la Comunidad de Madrid