sábado. 20.04.2024

Chapuzas del JK 5022 de Spanair

El personal de cabina no daba crédito cuando se enteró cómo los mecánicos habían solucionado el primer incidente del avión. El copiloto dijo que todo eso era “un parche”. Para bajar el nivel de la temperatura utilizaron una bolsa de hielo. Después decidieron quitar una pieza clave del avión, el relé. Las frases finales de comandante y copiloto vaticinaban lo peor.
NUEVATRIBUNA.ES - 10.05.2010

“¿Una bolsa de hielo?” ; “Toca madera tío”; “Me cagüen en la mar” . Estas son algunas de las últimas frases que se grabaron en las cajas negras de la cabina del vuelo JK 5022 de Spanair siniestrado en Barajas el 20 de agosto de 2008. Comandante, copiloto y una tercera voz no identificaba comentaban “el parche” que habían hecho los mecánicos. No tenían buenos augurios y su miedo se materializó con la muerte de 154 personas.

Una hora y media antes de que el equipo de cabina pronunciara sus últimas frases, el avión boeing MD-82 con el que pretendían viajar hacia Canarias, tenía una avería. Un problema de calentamiento en una sonda del avión. Llevaron el avión a los hangares para dejárselo a los mecánicos. La solución de los especialistas consistió en quitar el relé (un fusible que transmite fluido eléctrico a la resistencia de la sonda) para evitar que volviera a subir la temperatura de la sonda.

Una vez dado el visto bueno para volar, comandante y copiloto hablan con los mecánicos para ver cómo habían arreglado el problema. Cuando se enteran que para solucionar la incidencia los técnicos retiraron el fusible y aplicaron una bolsa de hielo para acelerar la bajada de la temperatura, el personal de cabina comenzó a ponerse nervioso.

Tercer ocupante de la cabina: “¿Qué es lo que era? ¿Han cambiado el relé?”

Copiloto: “No, lo han quitado”

Tercer ocupante de la cabina: “¡Cómo van a quitar el relé! ¿Han puesto hielo al final?”

Copiloto: “Pues de puta madre”

Tercer ocupante de la cabina: “¿Ha bajado mucho la temperatura?”

Copiloto: “¡Joder, del tirón!”

Tercer ocupante de la cabina: “¿Para que se enfríe antes el sensor? Pero si el problema ha sido el sensor, volverá a subir. Es un parche lo que han hecho ahí”

Copiloto: “Se puede hacer así”

Tercer ocupante de la cabina: “Pero poner hielo a un sensor para que esté dentro del límite...”

Copiloto: “No, no, eso es para que se enfriara mucho antes.”

“VUELA EL AVIÓN, VUÉLALO”

Los últimos minutos antes del trágico final son una agonía. Las grabaciones a las que ha tenido acceso la Cadena Ser muestran la desconfianza del personal, e incluso el copiloto bromea con el comandante y le dice que “no tienen que volver a volar juntos” porque en la última semana han tenido tres incidentes.

Copiloto: “Cada vez que he volado contigo hemos hecho algo, dos veces hemos acabado en un guiso (...)”

Comandante: “¿Tuyo?” (Cede los mandos a su compañero)

Copiloto: “Cagüen la puta”

Tercer ocupante de la cabina: “Vamos que nos vamos” (Despegue y ruidos)

Copiloto: “¿Fallo de motor?” (La voz de alarma suena 4 veces)

Comandante: “¿Cómo coño se quita la voz?”

Comandante: “Vuela el avión. Me cagüen la mar. Vuélalo”

Comandante: “Vuélalo” (Se escucha el primer golpe)

Comandante: “Mierda”. Después se escucha un segundo golpe, un grito del copiloto. Silencio total.

NUEVAS COMPARECENCIAS

Este lunes se retoma el juicio en el que se investiga el brutal siniestro. Desde el primer momento los familiares de las víctimas se mostraron convencidos de que se habían producido fallos técnicos que se podían haber evitado. A los pocos días del accidente se formó la Asociación de Afectados del vuelo JK5022 quienes se personaron como acusación popular en el juicio.

El juez que investiga el accidente retomará las declaraciones en el marco de la instrucción con las testificales de personal del servicio de emergencias y del servicio de mantenimiento de Spanair. Están citados varios bomberos, un médico especialista en grandes catástrofes y las dos personas que entonces eran responsables de los servicios de mantenimiento de Spanair.

La vicepresidenta de la Asociación de Afectados del vuelo JK5022, Pilar Vera, indicó a Europa Press que estas citaciones están encaminadas a saber la verdad sobre lo que pasó ese fatídico día. "Queremos detectar si hubo fallos organizativos por parte del servicio de mantenimiento para que no se vuelvan a ocurrir", apuntó.

"Estamos convencidos de que hubo fallos organizativos y que fueron la culpa del accidente", recalcó la vicepresidenta de la asociación, quien adelantó que si se detectan fallos tanto en el mantenimiento como en los servicios de emergencias se solicitarán nuevas imputaciones.

TARDANZA DEL RESCATE

Desde el inicio de la investigación, las víctimas han denunciado la tardanza de los equipos de emergencia, puesto que tardaron entre 30 y 40 minutos en llegar a la zona del siniestro.

Por ahora, el magistrado instructor mantiene imputados a dos técnicos de Spanair, entre ellos el jefe de mantenimiento de la compañía en Barajas, como responsables de 154 homicidios imprudentes y 18 lesiones imprudentes.

Chapuzas del JK 5022 de Spanair