VPN son las siglas de Virtual Private Network, en castellano Red Privada Virtual. Una conexión VPN te permite crear una red local sin necesidad que sus integrantes estén físicamente conectados entre sí, sino a través de Internet. Tienes las ventajas de la red local (y alguna extra), con una mayor flexibilidad, pues la conexión es a través de Internet y puede por ejemplo ser de una punta del mundo a la otra.
Normalmente, mientras usas Internet tu dispositivo se pone en contacto con tu proveedor de Internet, que es el que conecta con los distintos servicios web para ofrecerte los servicios en que estés interesado. Los sistemas de VPN protegen los datos personales a través de canales encriptados que garantizan que otros puedan ver lo que estás haciendo, saltar cortafuegos o censura y desbloquear contenidos que estén restringidos.
Dos de los principales servicios de VPN son Ciberghost y Surfshark y es importante conocer las características de los mismos para contratar la opción que más convenga con tus intereses de seguridad y tus necesidades personales.
Lo mejor es que consultes con expertos en lo que actualmente se define como ciberseguridad
Utilizadas habitualmente en las empresas para garantizar sus conexiones de seguridad su uso se está generalizando entre los particulares. Todos los días vemos en la televisión y en los periódicos como conversaciones privadas entre altos cargos de ministerios de seguridad como Interior o de la judicatura son expuestas a la opinión pública.
En la actualidad una elevadísima parte de nuestras consultas a internet las hacemos desde el móvil. Los pagos en los comercios, el control de las cuentas bancarias, los correos electrónicos, los mensajes vía sms o watsapp, etc. etc.
Por ello ante cualquier problema o conflicto lo primero que piden los jueces es la intervención de los ordenadores, teléfonos móviles o cualquier sistema de comunicación que usemos habitualmente. Para bien o para mal casi todo lo que hacemos o decimos queda registrado.
La ampliación del teletrabajo tanto en las administraciones públicas como en algunos sectores de las empresas privadas con miles de trabajadores fuera de sus oficinas requiere reforzar las medidas de seguridad. Es una imprudencia que puede resultar letal permitir acceder a la red propia directamente desde Internet sin poner barreras que dificulten la entrada.
Conseguir romper los bloqueos provocados por las censuras de algunos países puede hacer a través de la VPN. Si por ejemplo estás en Birmania y el servidor VPN está en Estados Unidos, los servidores valorarán que estás en este país, y podrás acceder a contenidos sólo disponibles allí y no disponibles en tu domicilio real.
Si en algún ámbito es recomendable el uso de VPN es en la gestión de las cuentas bancarias, sobre todo si accedes desde alguna red Wiffi de uso público. Los ladrones de contraseñas están a la espera de los incautos que lo hacen al igual que los ladrones de carteras acechan en el metro de Sol en Madrid o en las aglomeraciones a las puertas de los conciertos.
Disponer de la capa extra de seguridad que puedes conseguir mediante una conexión VPN, pues los paquetes se enviarán cifrados, es una buena manera de protegerte.
También debes tener en cuenta y valorar el precio que deberás pagar por la VPN, que tu velocidad será menor tanto al navegar por la red como en las descargas y subidas, la seguridad nunca es del 100% y tampoco está garantizado el anonimato absoluto, puesto que la VPN, dispone de esos datos.
Numerosos son los factores que puedes analizar a la hora de definirte por alguno de los VPN disponibles en el mercado:
La tecnología de encriptación, el país en que tenga su sede que ofrezca garantías de privacidad, número de servidores y su distribución entre todos los países del mundo, la velocidad de los mismos, los sistemas operativos en que están disponibles, la calidad de la atención al cliente, los niveles de cifrado, el interruptor automático cuando se corta la conexión a internet, la política de registros y datos de los usuarios y su borrado sistemático, el control por parte de auditorías externas.
Sin duda, en este aspecto como en otros muchos de la vida, lo mejor es que consultes con expertos en lo que actualmente se define como ciberseguridad. No te arrepentirás.
