Santiago Carrillo Solares, exsecretario general del Partido Comunista de España (PCE), fallecido este miércoles en Madrid, nació en Gijón (Asturias) el 18 de enero de 1915, donde pasó buena parte de su infancia. A los nueve años, se trasladó a Madrid junto al resto de su familia cuando su padre fue nombrado dirigente nacional de PSOE y UGT.
En 1930, comenzó a colaborar en la publicación 'El Socialista' y llegó a codearse con periodistas como Víctor de la Serna (Informaciones) o Wenceslao Fernández Flórez (ABC). Con la llegada de la II República, se encuadró en la minoría revolucionaria del Partido Socialista y en 1934 fue nombrado secretario de las Juventudes Socialistas.
Ese mismo año empezó a colaborar estrechamente con el líder revolucionario del PSOE Largo Caballero y participó en la Revolución de 1934. Por ello, Carrillo fue detenido y no saldría de la cárcel hasta 1936, después de la victoria electoral del Frente Popular, que formó el último Gobierno democrático de la II República, frustrado por la sublevación militar del general Francisco Franco.
En la cárcel se distanció de Largo Caballero, al considerarlo demasiado moderado para sus ideas. Ya en libertad, los representantes de la Internacional Comunista le propusieron viajar a Moscú para negociar la unificación de Juventudes Comunistas y Juventudes Socialistas. En la URSS, Carrillo quedó deslumbrado por el auge de la Revolución Bolchevique y volvió a España al frente de las Juventudes Socialistas Unificadas.
Durante la Guerra Civil, Carrillo abandonó el PSOE y se afilió al PCE después de que el Gobierno republicano dejase Madrid ante la presión del ejército nacional. Acto seguido, fue nombrado consejero de Orden Público por la Junta de Defensa de la capital, establecida como medida de urgencia para cubrir el vacío de poder en la ciudad y diseñar su escudo frente al enemigo.
Para evitar que el ejército de Franco ampliase sus efectivos, la Junta de Defensa decidió evacuar a los presos de las cárceles madrileñas, así como a todos aquellos civiles y militares afines a los nacionales. Con este fin, en noviembre de 1936 partieron de Madrid los primeros convoyes, pero varios autobuses fueron desviados de su camino.
Diversos miembros del ejército republicano desalojaron los autobuses y fusilaron a sus pasajeros en Paracuellos del Jarama (Madrid). Santiago Carrillo siempre negó su participación o responsabilidad en los hechos, aunque desde la derecha siempre se le acusó de haber amparado o permitido los fusilamientos.
SUSTITUYE A PASIONARIA EN EL PCE
En 1939, Carrillo se refugió en Francia después de la victoria del general Franco y desde el exilio encabezó la lucha contra el régimen, convirtiendo al PCE en una de las formaciones políticas más beligerantes contra la dictadura. En 1960, sucedió a Dolores Ibárruri, 'Pasionaria', como secretario general del PCE.
En 1976, meses después de la muerte de Franco, regresó a España de manera clandestina para forzar al Gobierno de Adolfo Suárez a negociar la legalización del PCE. En abril de 1977, el Gobierno de Adolfo Suárez legalizó el Partido Comunista y, poco después, Santiago Carrillo fue elegido diputado por Madrid en las primeras elecciones democráticas. Fue reelegido en este cargo en 1979 y 1982 pero, tras problemas internos en el PCE y los malos resultados electorales, abandonó la Secretaría General y fue sustituido por Gerardo Iglesias, con quien mantuvo disputas que terminaron con la expulsión de Carrillo y sus seguidores en 1985.
FUNDA EL PARTIDO DE LOS TRABAJADORES DE ESPAÑA
Un año más tarde, Carrillo fundó el Partido de los Trabajadores de España-Unidad Comunista (PTE-UC), que no logró buenos resultados electorales y terminó integrándose en el Partido Socialista. Carrillo abandonó la política activa y se dedicó a escribir, dar conferencias y participar en programas radiofónicos hasta el final de su vida. En 2005, fue investido Doctor Honoris Causa por la Universidad Autónoma de Madrid.
En 2008, participó en el doble documental 'Últimos testigos: Fraga Iribarne-Carrillo, comunista' (2008), dirigido por Manuel Martín Cuenca y José Luis López-Linares. Con motivo de su estreno en 2009, Carrillo aseguró que la película era una "muestra de sinceridad" sobre su vida y la historia de España porque no tenía "nada que ocultar".
Entre sus obras como escritor, destacan 'Después de Franco, ¿qué?' (1965); 'Memorias' (1993); 'La Segunda República. Recuerdos y reflexiones' (1999); 'La crispación en España. De la Guerra Civil a nuestros días' (2008), y 'Dolores Ibárruri. Pasionaria, una fuerza de la naturaleza' (2008), entre otros.
INGRESOS HOSPITALARIOS
Santiago Carrillo ha sido ingresado de urgencia los últimos años debido a diferentes dolencias. La última de ellas fue el pasado 17 de julio en la planta de neurología del hospital madrileño Gregorio Marañón por un problema de riego sanguíneo, aunque fue dado de alta dos días después.
El 20 de abril de este año, pasó por el mismo hospital para ser intervenido de una apendicitis. En octubre de 2011 fue una infección urinaria lo que motivó que el histórico dirigente pasara por el hospital. Con anterioridad, en 2008, ingresó en otro hospital de Madrid por una insuficiencia cardiaca.