La persona que visita Japón inmediatamente se ve sorprendida por la gran importancia del transporte por ferrocarril en la vida diaria de sus ciudadanos, por la modernidad de sus instalaciones y por el papel de núcleo central urbano que representan las estaciones ferroviarias en las ciudades y grandes urbes. La actividad incesante de las mismas, el ir y venir de miles de personas a todas horas, constituye el epicentro de una gran movilidad, que tiene como eje central el transporte por ferrocarril, en acertado detrimento de otros medios de transporte como el vehículo privado.
No en vano Japón sigue siendo el país del mundo donde los trenes alcanzan la velocidad máxima y, al mismo tiempo, ofrecen un excelente servicio a un elevado porcentaje de su población total. El país del sol naciente consigue el primer lugar en el estudio sobre el ferrocarril que ha elaborado recientemente goeuro, que tiene en cuenta distintos aspectos. Los factores más importantes que se han valorado para la elaboración de este ranking son: la cobertura de población, que contabiliza la población total con acceso al servicio de tren de alta velocidad, la velocidad récord, la velocidad operativa, que es la que efectúan en las operaciones comerciales los trenes, el coste medio por kilómetro y el porcentaje total de líneas de alta velocidad con relación al total de kilómetros de las vías convencionales.
Llama poderosamente la atención al viajero que recorre el interior de Japón en tren (experiencia muy recomendable), y al llegar a cualquier ciudad de tamaño medio, observar como la Estación de Ferrocarril se ha convertido en la auténtica “Plaza Mayor” del municipio. De ellas parten las calles y avenidas principales, están rodeadas de hoteles, restaurantes, lugares de ocio y centros comerciales, muchas veces situados dentro del recinto de la propia estación.
Sin duda la rapidez de los trenes juega un papel determinante en la relevancia que ha alcanzado esta modalidad de transporte en aquel país.
En el mencionado estudio de Goeuro, después de Japón se sitúan otros países asiáticos como Corea del Sur y China. A continuación Francia y España lideran los países europeos.
España avanza de una manera rápida en contar con unos buenos servicios de alta velocidad, como lo demuestra el quinto lugar que ocupa en el ranking mundial
No es necesario retroceder muchos años para recordar que en un trayecto convencional entre Madrid y Barcelona se tardaba cerca de 14 horas y que eran habituales los retrasos. En la actualidad ese recorrido se efectúa en 2 horas y media y muy rara vez llega tarde un tren. Los trenes españoles son los segundos más veloces del mundo, al mismo nivel que Alemania, Francia o Japón y sólo superados por China.
La ruta de alta velocidad Madrid a Barcelona, que continúa hasta la frontera con Francia, es la más larga de Europa, alcanzando los 804 km. de longitud. España con 3.100 km es el país con más kilómetros de redes de alta velocidad de Europa y segundo en el mundo tan sólo por detrás de China (19.369 km.), un país con una superficie 19 veces mayor.
China sin duda es el país del mundo que está viviendo una mayor transformación de sus líneas ferroviarias. Ninguna persona que sea amante del ferrocarril puede dejar de leer el maravilloso libro de Paul Theroux, “En el gallo de hierro”. Este conocido escritor estadounidense, aprovechando un año sabático, decidió recorrer toda China viajando sólo en tren. Recorrió miles de kilómetros y el libro es un compendio de detalles, anécdotas y conversaciones que refleja mejor que cualquier tratado, la realidad profunda de ese inmenso país, en 1986, fecha en la que realizó el viaje. Los trenes chinos actuales están esperando a un nuevo escritor de viajes, que narre como se vive en la actualidad y cómo han influido los cambios culturales y económicos de los últimos 30 años.
En la actualidad a nivel mundial hay 35.215 km. de líneas de alta velocidad en uso, se están construyendo 17.418 km. y hay previstos 34.500 km. más.
España planea construir 2.700 km. de nuevas vías del AVE y alcanzar una cobertura de población del 37,68% frente al 20,51% actual
En cuanto al precio que se paga por los billetes España es el segundo país más barato de Europa y quinto del mundo. La puesta en marcha de nuevos recorridos supuso que en 2015 se sobrepasaran los 30 millones de viajeros en las líneas del AVE, cifra que irá creciendo según se vayan abriendo las nuevas líneas y otros servicios, descuentos y promociones previstos.
