viernes. 19.04.2024

"La objeción a la nueva ley del aborto es desobediencia civil"

Así de claro se mostró el ministro de Justicia, Francisco Caamaño, quien ha rechazado crear un registro de médicos objetores. “En nuestro país no hay más objeción de conciencia que aquélla que está expresamente establecida en la Constitución”, explicó Caamaño, que recordó que el Derecho “regula las relaciones de familia, no la confianza entre los miembros”.
NUEVATRIBUNA.ES/AGENCIAS-12.08.09

El ministro de Justicia, Francisco Caamaño, ha asegurado que los médicos y sanitarios que objeten a la futura Ley del Aborto realizarían un acto de "desobediencia civil". Según ha dicho, "hay supuestos en los que debe haber objeción de conciencia", pero este derecho debe ser legislado por "el único órgano constitucional que puede regular los derechos fundamentales de los ciudadanos", en referencia a las Cortes Generales. Con todo, el Tribunal Constitucional sostiene que la objeción de conciencia de los sanitarios es un derecho.

"En nuestro país no hay más objeción de conciencia que aquélla que está expresamente establecida en la Constitución o por el legislador en las Cortes Generales", ha asegurado el ministro, que ha calificado de "muy preocupante" que la obligación de autorización de los padres para que aborte una menor de 16 años pueda llevarla "a un circuito sanitario que no está homologado". Caamaño ha rechazado crear un registro de médicos y sanitarios objetores.

"Todos estamos sometidos a la ley. Las ideas personales no pueden excusarnos del cumplimiento de la ley porque, si no, nos llevaría en muchísimos temas, en este y en otros muchos, a la desobediencia civil", ha asegurado el ministro de Justicia. "Allí donde no hay una ley que lo permita, estoy con el Tribunal Supremo y su sentencia sobre Educación para la Ciudadanía. No cabe la objeción de conciencia", ha dicho.

LOS POLÉMICOS 16

El ministro de Justicia ha señalado que los 16 años marcan la mayoría de edad sanitaria en España "y en la mayoría de los países de nuestro entorno", en referencia a la posibilidad de que las menores de 16 años puedan abortar sin el consentimiento paterno, y "más allá" de la negociación que puedan llevar a cabo los grupos parlamentarios durante la tramitación del proyecto de ley.

"¿Por qué no puede serlo para este tipo de prácticas si lo es para otro?", se ha preguntado el ministro, que ha señalado que "la confianza no la sustituye el Derecho". "El Derecho regula el matrimonio, no regula el amor. El Derecho regula las relaciones de familia, no la confianza entre los miembros de la familia", ha explicado.

UN PROYECTO CONSTITUCIONAL

El ministro de Justicia ha defendido "plenamente" la "constitucionalidad" del anteproyecto de ley impulsado por la ministra de Igualdad, Bibiana Aído. Según ha dicho, el proyecto no introduce "ningún elemento excepcional o distinto" al recogido en la legislación de otros países occidentales.

En todo caso, se ha mostrado abierto a que la negociación en las Cortes pueda establecer "alguna modulación" al proyecto, entre las que ha citado una aplicación del "modelo francés", en el que la menor debe acudir a los servicios sanitarios "acompañada de un adulto". En todo caso, "no de sus padres, puede ser su novio", ha explicado el ministro de Justicia. Caamaño ha defendido la posibilidad de que las menores de 18 años que quieran abortar tengan que recibir "refuerzos de información" en el sistema sanitario.

"La objeción a la nueva ley del aborto es desobediencia civil"