12A | EN EL DÍA MUNDIAL DE LA ATENCIÓN PRIMARIA

“La deriva privatizadora del sistema sanitario y la crisis han sido nefastos para la Atención Primaria”

Así lo denuncia la Federación de Asociaciones para la Defensa de la Sanidad Pública que pide reforzar la Atención Primaria para garantizar la salud de la población.

Los recortes han incidido de manera especialmente negativa en la AP que ha comprobado cómo sus presupuestos, ya insuficientes, decrecían mucho más que los del resto de la asistencia sanitaria

En el Día Internacional de la Atención Primaria, la Federación de Asociaciones para la Defensa de la Sanidad Pública (FADSP), hace un llamamiento a los poderes públicos para reforzar este servicio sanitario esencial para la salud de la población.

A juicio de este colectivo, “la deriva privatizadora del sistema sanitario y la crisis han sido nefastos para la AP”, y ello ha sido tanto porque encajaba difícilmente en los proyectos empresariales de mercantilización de la asistencia sanitaria, como porque los recortes han incidido de manera especialmente negativa en la AP que ha comprobado cómo sus presupuestos, ya insuficientes, decrecían mucho más que los del resto de la asistencia sanitaria, lo que ha producido pérdidas de puestos de trabajo, la no reposición de las bajas, incrementos de personal subempleado y precario, el deterioro de los edificios y del equipamiento, etc.

Cuando se cumplen cuarenta años de la conferencia de Alma-Ata, que sentó las bases del desarrollo de la AP su desarrollo en el Mundo y en España, la FADSP recuerda que, en España, tras la aprobación de la Ley General de Sanidad en 1986, “pronto pudo comprobarse que las administraciones públicas se centraban en desarrollar su vertiente asistencial, prestando poco interés a la promoción y prevención y marginando totalmente la participación comunitaria.

Además, el RDL 16/2012 ha supuesto la pérdida del derecho a la atención sanitaria de colectivos especialmente vulnerables (los inmigrantes regularizados) y los ciudadanos del país que residen en el extranjero, y establece barreras económicas para acceder a prestaciones asistenciales necesarias, los copagos farmacéuticos que según el último Barómetro Sanitario impiden al 4,4% de la población, 2 millones de personas, retirar medicamentos prescritos, y otros copagos que aún no se han implantado pero que siguen estando vigentes en el BOE (transporte sanitario, dietas, medicamentos dispensados pro las farmacias hospitalarias…).

Tampoco conviene olvidar -añade la FADSP- que “hay otros problemas ya antiguos que oscurecen el funcionamiento de la AP”, como la persistencia del mutualismo (MUFACE, ISFAS, MUGEJU) que excluye a sectores socialmente influyentes de la atención sanitaria pública en beneficio de las empresas privadas, las dificultades para el acceso a pruebas diagnósticas desde los centros de salud, la insuficiente dotación de profesionales de enfermería que lastra el necesario contenido comunitario de la AP, y el hospitalocentrismo, que no solo no se ha superado, sino que se ha aumentado “por la fascinación tecnológica alentada por las multinacionales del sector, los medios de comunicación y la propia administración sanitaria”.

Y todo esto cuando la AP en España tiene un gran reconocimiento internacional y el aprecio de la población, que la prefiere mayoritariamente a la alternativa privada, y que considera en el 86% de los casos que la asistencia recibida en AP fue buena o muy buena.

“Es obvio -afirma la FADSP- que ello es debido principalmente al esfuerzo y compromiso de los profesionales que todavía entienden el papel clave que desempeñan en la Sanidad Pública y ejercen de manera diaria su responsabilidad con la salud de la población”.


DIEZ PROPUESTAS

El colectivo reclama reforzar la Atención Primaria de Salud convirtiéndola en el eje del sistema sanitario público. Para ello, plantea diez propuestas:

  1. Derogar el RDL 16/2012, y la integración de la atención sanitaria de los funcionarios en el Sistema Nacional de Salud.
  2. Hay que garantizar una financiación suficiente de la AP de al menos el 15% de los presupuestos sanitarios en el próximo año, en un horizonte de alcanzar el 25% a medio plazo.
  3. Es necesario desarrollar los aspectos de promoción y prevención de la AP para lo que se necesita incrementar notablemente los recursos de enfermería.
  4.  Más acceso a pruebas diagnósticas y más capacidad resolutiva
  5. Mayor facilidad en la coordinación con el hospital y con los servicios sociales
  6. Mejoras en los sistemas de información para evaluar discrecionalmente actividad, calidad y resultados
  7. Mecanismos de incentivación de la persecución de la excelencia mediante acuerdos con la administración transparentes y revisables, basados en criterios de calidad de la actividad y de los resultados en salud
  8. Estímulos a la formación continuada y a la investigación independientes de la industria farmacéutica y tecnológica
  9.  Establecer mecanismos efectivos de participación comunitaria y profesional.
  10.  Garantizar la AP pública acabando con las privatizaciones y recuperando los centros privatizados