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NUEVATRIBUNA.ES / AGENCIAS - 25.7.2009

El dirigente hondureño, Guillermo Amado , denunció a teleSUR que retenes militares impiden el paso a las caravanas que se dirigen a la localidad de El Paraiso en la frontera con Nicaragua, para apoyar el regreso de Zelaya. En contacto telefónico, Amado indicó que un "convoy militar reforzado por policías y más de 70 vehículos policiales no nos dejan pasar".

Asimismo, denunció que en esta zona fronteriza "una ambulancia está dándole bombas lacrimógenas a los militares hondureños", para reprimir a la población que se traslada a esta localidad para apoyar el retorno el presidente Manuel Zelaya . Añadió que con bombas lacrimógenas y disparos, los militares del régimen dictatorial intentan paralizar y desaparecer la manifestación. "Ahorita está sobrevolando un avión sobre nosotros y hay más de 70 unidades de vehículos policiales que no nos dejan pasar", agregó.

Por su parte, el líder social Rafael Alegría informó que "están tratando de dialogar con las fuerzas policiales para que nos abran paso hacia la frontera, pero hay una gran cantidad de gente que impide nuestra llegada". Indicó que existe una gran movilización social en todo el país de personas que están viajando a la frontera para recibir al presidente Zelaya, "pero esto todavía no ha sido posible".

Expresó que las fuerzas militares han lanzado gran cantidad de bombas lacrimógenas, pese a lo cual la gente de mantiene en pie y firme en su propósito de llegar a la frontera. "El país está paralizado en el norte el sur, así como las empresas. El pueblo ha rechazado el toque de queda y hasta ahora sigue caminando, no ha hecho caso a esta orden del gobierno de facto", precisó.

Manifestantes a favor de Zelaya lograron llegar al sector fronterizo Las Manos a través de vías alternas montañosas, puesto que las fuerzas golpistas han bloqueado todos los accesos. Ante estas denuncias de represión, el presidente Zelaya se vio obligado a retroceder a territorio nicaragüense, puesto que no porta armas, ni lo acompañan funcionarios de seguridad.

Represión militar