Desde 1997, México D.F., capital de los Estados Unidos Mexicanos, está gobernada por la izquierda. El pasado 5 de diciembre fue nombrado Jefe de Gobierno Miguel Ángel Mancera, que obtuvo el apoyo del 63% de los votantes en la candidatura del PRD (Partido de la Revolución Democrática), principal partido de la izquierda mexicana. Abogado, buen conocedor de España, donde ha cursado estudios, es experto en Seguridad, y deberá enfrentarse a los problemas endémicos de una de las mayores megalópolis del mundo, como son la pobreza, la desigualdad social, la economía sumergida, el suministro de agua, la contaminación, la mejora de la movilidad urbana, la corrupción y de forma destacada la inseguridad.
La ciudad presenta grandes desigualdades. Junto a nuevos barrios como Santa Fe, equiparables a La Defense en Paris o a la City en Londres, donde se concentran las grandes empresas multinacionales y viviendas de lujo, siguen predominando amplias zonas de infraviviendas, carentes de servicios sociales básicos y los barrios tradicionales necesitados de grandes inversiones en rehabilitación y mantenimiento. Esta dualidad, presente en todo el territorio mexicano, se ve acentuada en la inmensa zona metropolitana de México D.F., con una población superior a veintiún millones de habitantes.
Entre las nuevas metas que ya ha explicitado Miguel Ángel Mancera destaca la apuesta por construir 100 Kilómetros de Metro bus. Este sistema de transporte en superficie, rápido y económico, cuenta en la actualidad con dos líneas que cruzan vertical y horizontalmente la ciudad. Su elevado uso y los efectos beneficiosos que tiene en la disminución de la contaminación y de la utilización del vehículo privado han llevado a las nuevas autoridades a apostar de forma decidida por esta modalidad de transporte público.
Otro aspecto, ya indicado por el nuevo gobernador en su toma de posesión, es implantar el denominado “Escudo Centro”, para acabar con la criminalidad y la inseguridad, en colaboración con los gobernadores de los estados vecinos de Morelos, Puebla, Tlaxcala, Hidalgo y México.
Miguel Ángel Mancera, al ser preguntado “¿Cual es el gran tema pendiente, el primer paso con la ciudad de México?”. Ha respondido: “Trabajar primero para mantener la seguridad y lo segundo ofrecer la prestación de servicios que se nos pidió”.
Del éxito o el fracaso en la gestión de esta ciudad dependen en gran medida los resultados del conjunto del país. Hay que tener presente que México D.F. aporta el 35% del PIB nacional, disfrutando en la actualidad de un crecimiento vertiginoso que se calcula llevará a triplicar su economía para el año 2020.
Mejorar la imagen de la ciudad en el mundo y conseguir el mayor apoyo por parte de otros países, es lo que ha llevado a Miguel Ángel Mancera a realizar el nombramiento como Coordinador de Asuntos Internacionales de Cuauhtémoc Cárdenas, líder moral del Partido de la Revolución Democrática y persona de reconocido prestigio a nivel mundial.
Por otra parte, el recién nombrado Presidente de México, Enrique Peña Nieto del PRI ha manifestado su total apoyo y colaboración con el Distrito Federal, en el nuevo marco de entendimiento abierto con la firma de “El Pacto por México”. Después de 12 años de enfrentamiento del gobierno de la ciudad con el gobierno central, dirigido por el PAN, no cabe duda que la nueva situación contribuirá a la mejora de las relaciones institucionales entre ambas administraciones y a la realización de las grandes inversiones necesarias en seguridad, servicios sociales e infraestructuras.
