jueves. 18.04.2024
cooperante

Asistimos a una de las mayores crisis de refugiados desde la segunda guerra mundial, cientos de miles de personas están huyendo de sus hogares con un solo propósito, mantener la vida, que el futuro siga existiendo. Vienen de Siria, Irak, Afganistán y países del África subsahariana.

55 millones de personas reciben protección y/o asistencia de ACNUR en más de 120 países y la reciben de mano de sus cooperantes, a quienes hoy hacemos nuestro reconocimiento especial.

Recordemos las palabras del Secretario General de la ONU. Ban Ki-moon:“Es una crisis de solidaridad, no una crisis de cifras”  Mientras, Europa discute si acoge a 250.000 refugiados, la inmensa mayoría de los millones y millones de refugiados y desplazados no están en Europa. La mayor solidaridad se da en países cercanos a los conflictos, Pakistán, Irán, Jordania, o Turquía.  Líbano, con una población de cerca de 4,4 millones de habitantes y una economía más débil, acoge a 1,2 millones de refugiados sirios. Algo está fallando y han sido precisamente los ciudadanos quienes están haciendo reaccionar a los gobiernos. Por toda Europa y también en nuestro país estamos conociendo iniciativas de personas que ofrecen sus casas, sus coches, su tiempo para atender a los pocos refugiados que consiguen alcanzar su sueño de supervivencia.

El 8 de septiembre es el día del Cooperante, un día para visibilizar a miles de hombres y mujeres que se dedican a que este mundo sea un poquito mejor, dando lo mejor de sí mismos y en demasiadas ocasiones trabajando de forma precaria.

Desde 2011, la cooperación ha pasado de ser el rubro solidario de la identidad de España a una política residual y testimonial, limitada en sus recursos y capacidades, y aún más empequeñecida en sus miras, llegando a su instrumentalización al servicio de intereses privados o partidistas. En solo cuatro años de gobierno, el PP ha sido capaz de desmantelar la política que tanto esfuerzo nos llevó construir y, sin embargo, es hoy más que nunca cuando el mundo necesita de la Cooperación para el Desarrollo.

El desmantelamiento del Partido Popular ha sido más evidente en la Agencia Española de Cooperación Internacional para el Desarrollo (AECID), pero también ha alcanzado a la cooperación descentralizada y a las ONG, que han visto reducido a mínimos históricos el apoyo de las administraciones públicas. Siendo además la acción humanitaria la mayor damnificada. En una legislatura el PP ha situado las cifras de Ayuda Oficial al Desarrollo (AOD) en mínimos que no veíamos desde los años 80, lo que ha tenido y tiene serias consecuencias no sólo en lo interno, sino fundamentalmente en el compromiso de España con el mundo, y en su peso como actor internacional. Desde 2011, el presupuesto de la AECID ha disminuido un 71,30%, más de 628 millones de euros, y el de la Secretaría de Estado de Cooperación Internacional y para lberoamérica, 75,84%, más de 836 millones.

Los y las socialistas apostamos por la solidaridad porque forma parte de nuestros principios, está en nuestro ADN y nuestro objetivo es el de devolver a la política de Cooperación para el Desarrollo a la categoría de política de Estado, dotándola de la base legal, la institucionalidad, el presupuesto y las capacidades técnicas necesarias, para convertirla en una verdadera política de Estado, coherente, eficaz y sostenible en el tiempo. Sólo así España podrá asumir en condiciones retos como al que nos estamos enfrentando en estos momentos, sólo así nuestros cooperantes podrán realizar su valiosísimo trabajo de forma efectiva y segura. Por ellos, porque están en el corazón de la cooperación, debemos asegurarles que pueden realizar su trabajo en las mejores condiciones y así lo exigimos al Gobierno.

El PSOE reclama al Gobierno mayor compromiso en Cooperación para el Desarrollo