jueves. 28.03.2024

Londres recupera sus famosos autobuses rojos de dos pisos, sin puertas, en los que se puede subir y bajar en movimiento, en una versión más aerodinámica y ecológica, según informa la cadena BBC News en su pagina web.

Los clásicos 'Routemasters', que desde 1954 permitían subir y bajar a los viajeros del autobús en cualquier momento por su puerta trasera, forman parte de una promesa electoral del alcalde conservador de Londres, Boris Johnson, durante la campaña de 2008.

Serán ocho los nuevos autobuses que circulen por la ruta 38 que une el barrio de Hackney (este de Londres) con la estación de tren de Victoria.

Además de la puerta trasera, los nuevos modelos disponen de otras dos entradas en la parte delantera y central del vehículo y de dos escaleras en cada extremo para agilizar las entradas y salidas del autobús y reducir el tiempo de las paradas.

Los posibles atropellos se han tratado de solucionar con una gran pantalla de cristal en la parte de atrás del autobús que permite ver el tráfico.

"El interior verde de este autobús significa que es dos veces más eficiente en combustible que un autobús diesel y el más ecológico de su clase"

ROJO POR FUERA, VERDE POR DENTRO

El nuevo diseño, creado en exclusividad para Londres por la empresa norirlandesa Wrightbus, mezcla los elementos tradicionales de sus antecesores (el color rojo, las dos plantas y la puerta trasera abierta) con tecnología punta para asegurar bajos niveles de contaminación y un bajo consumo energético.

Lleva motor híbrido, un sistema de frenado que recicla el 90 % de la energía empleada, y algunos materiales ligeros utilizados en los monoplazas de 'Fórmula Uno'.

El director de operaciones del Metro de Londres, Mike Weston, asegura que estos nuevos autobuses se convertirán en "un espectáculo muy apreciado en las calles de Londres".

Pero para el parlamentario laborista David Lamy, la puesta en marcha del nuevo servicio tiene un coste muy elevado ya que cada nuevo autobús supone un precio de 1,4 millones de libras (1,6 millones de euros) comparados con el autobús de dos pisos tradicional que cuesta unas 190.000 libras (224.665 euros).

El alcalde defiende su proyecto, asegurando que se hará una importante contribución económica a las industrias manufactureras del país, además de conseguir una ciudad "más limpia, más verde y más agradable". "El interior verde de este autobús significa que es dos veces más eficiente en combustible que un autobús diesel y el más ecológico de su clase", justificó.

Este símbolo de la ciudad británica llega en un año muy especial para Londres, con la celebración del Diamond Jubilee, que festeja el 60 aniversario de la coronación de la reina Isabel II y los Juegos Olímpicos que se celebrarán este verano.

Londres recupera sus famosos autobuses rojos sin puerta