nuevatribuna.es
16 de agosto de 2009, 7:10
NUEVATRIBUNA.ES / AGNCIAS - 14.08.2009
La representación opositora en la Asamblea Nacional (Congreso) de Venezuela se retiró de la sesión en la que se debatía un polémico proyecto de Ley de Educación, en una jornada en que 12 periodistas resultaron heridos por un ataque de grupos simpatizantes del oficialismo.
La fracción del partido PODEMOS de 11 diputados decidió retirarse de la cámara, dejando abierto el camino para que la mayoría oficialista apruebe el proyecto, aunque anunció que agotará las gestiones para convocar una consulta para abrogar la ley.
El jefe legislativo de PODEMOS, Ismael García, anunció que organizará un plan para evitar que se imponga "un proyecto autoritario, hegemónico que no tiene nada que ver con Venezuela, con la Constitución".
"Aquí no se escuchó a nadie, no se escuchó el planteamiento de la Iglesia Católica. Llegó la hora de reaccionar, no vamos a aceptar esta ley, vamos a pedir un referéndum para preguntarle al pueblo si acepta o no esta ley. Llamo al pueblo a defender la Constitución, que está siendo violada", aseguró.
La jornada resultó apasionada en la cámara y violenta en sus alrededores. "No aguantan un debate de altura, ni porque ha hablado la Iglesia Católica golpista", dijo la diputada oficialista Iris Varela al recordar los pronunciamiento de los obispos católicos contra la ley.
VIOLENCIA PREVIA
Horas antes, un grupo de periodistas que protestaba contra el proyecto de ley fue atacado con piedras y palos, lo que dejó 12 heridos. Los periodistas de los diarios "Ultimas Noticias", "El Mundo" y "Líder en Deportes" estaban en la céntrica avenida Urdaneta repartiendo volantes impresos contra la Ley de Educación, cuando fueron atacados por grupos simpatizantes del oficialismo, primero con gritos y después con piedras y palos.
Explicó que los volantes que repartían llamaban la atención de un artículo de la ley que autoriza al Ministerio de Educación a suspender las transmisiones de cualquier medio de prensa cuando lo considere necesario. El representante sindical del diario, Ubaldo Arrieta, fue atacado a golpes por varios sujetos que lo acusaron de ser "representante de la oligarquía".
El director de "Últimas Noticias", Eleazar Díaz Rangel, dijo que los periodistas fueron agredidos sin razón y que los hechos "merecen el repudio de todos, incluyendo de quienes apoyan" el proyecto de ley.
A la vez, el secretario general del Sindicato de Trabajadores de la Prensa, Gregorio Salazar, pidió el cese "del verbo incendiario del presidente Hugo Chávez, que deje de usar el odio social como combustible de su revolución".
CASTIGO A LOS OPOSITORES
Poco antes, grupos que rechazan y que apoyan el proyecto de Ley de Educación marcharon hasta la Asamblea Nacional (Congreso), pero sólo quienes lo respaldan pudieron llegar a la cámara, mientras que quienes lo repudian fueron repelidos con gases lacrimógenos.
La sede del Congreso fue acordonada por brigadas antimotines de la policía y de la Guardia Nacional (policía militarizada) que permitieron pasar a los manifestantes a favor del proyecto y simpatizantes del Gobierno, para apoyar la sesión en la que se espera la aprobación del proyecto.
Los manifestantes, vestidos con camisetas rojas, llegaron con pancartas a la sede legislativa y dijeron que apoyan el proyecto por la democratización de la educación que propone y la apertura de la universidad a todos los sectores.
El proyecto fue aprobado en una primera discusión y se espera que pase la segunda antes de ser promulgado por Chávez, dado el dominio que mantiene el oficialismo en la cámara.
LA POLÉMICA LEY
El gobierno dijo que entre los beneficios de la nueva ley destacan el impulso de la autonomía universitaria, el análisis de los medios de prensa como cátedra, la integración familia-docente e igualdad educativa.
Mientras los manifestantes alegaban que el proyecto vulnera la autonomía universitaria y que pretende ideologizar a los estudiantes dentro del proyecto socialista del gobierno.
La marcha en apoyo al proyecto fue acompañada por el ex alcalde de Caracas y dirigente del Partido Socialista Unido de Venezuela (PSUV), Freddy Bernal, quien afirmó que la oposición miente cuando dice que la ley no ha sido discutida.
"Este proyecto tiene dos años en discusión, hemos hablado con las universidades, con los rectores, con los consejos comunales. Aquí vinieron rectores, estudiantes, sacerdotes.
Esta ley la vamos a aprobar no sólo porque tenemos mayoría en la Asamblea, sino porque tenemos mayoría en el pueblo", aseveró. El cardenal Jorge Urosa pidió suspender la aprobación del proyecto hasta septiembre, cuando terminan las vacaciones escolares, al tiempo que rechazó la eliminación de la educación religiosa.
La representación opositora en la Asamblea Nacional (Congreso) de Venezuela se retiró de la sesión en la que se debatía un polémico proyecto de Ley de Educación, en una jornada en que 12 periodistas resultaron heridos por un ataque de grupos simpatizantes del oficialismo.
La fracción del partido PODEMOS de 11 diputados decidió retirarse de la cámara, dejando abierto el camino para que la mayoría oficialista apruebe el proyecto, aunque anunció que agotará las gestiones para convocar una consulta para abrogar la ley.
El jefe legislativo de PODEMOS, Ismael García, anunció que organizará un plan para evitar que se imponga "un proyecto autoritario, hegemónico que no tiene nada que ver con Venezuela, con la Constitución".
"Aquí no se escuchó a nadie, no se escuchó el planteamiento de la Iglesia Católica. Llegó la hora de reaccionar, no vamos a aceptar esta ley, vamos a pedir un referéndum para preguntarle al pueblo si acepta o no esta ley. Llamo al pueblo a defender la Constitución, que está siendo violada", aseguró.
La jornada resultó apasionada en la cámara y violenta en sus alrededores. "No aguantan un debate de altura, ni porque ha hablado la Iglesia Católica golpista", dijo la diputada oficialista Iris Varela al recordar los pronunciamiento de los obispos católicos contra la ley.
VIOLENCIA PREVIA
Horas antes, un grupo de periodistas que protestaba contra el proyecto de ley fue atacado con piedras y palos, lo que dejó 12 heridos. Los periodistas de los diarios "Ultimas Noticias", "El Mundo" y "Líder en Deportes" estaban en la céntrica avenida Urdaneta repartiendo volantes impresos contra la Ley de Educación, cuando fueron atacados por grupos simpatizantes del oficialismo, primero con gritos y después con piedras y palos.
Explicó que los volantes que repartían llamaban la atención de un artículo de la ley que autoriza al Ministerio de Educación a suspender las transmisiones de cualquier medio de prensa cuando lo considere necesario. El representante sindical del diario, Ubaldo Arrieta, fue atacado a golpes por varios sujetos que lo acusaron de ser "representante de la oligarquía".
El director de "Últimas Noticias", Eleazar Díaz Rangel, dijo que los periodistas fueron agredidos sin razón y que los hechos "merecen el repudio de todos, incluyendo de quienes apoyan" el proyecto de ley.
A la vez, el secretario general del Sindicato de Trabajadores de la Prensa, Gregorio Salazar, pidió el cese "del verbo incendiario del presidente Hugo Chávez, que deje de usar el odio social como combustible de su revolución".
CASTIGO A LOS OPOSITORES
Poco antes, grupos que rechazan y que apoyan el proyecto de Ley de Educación marcharon hasta la Asamblea Nacional (Congreso), pero sólo quienes lo respaldan pudieron llegar a la cámara, mientras que quienes lo repudian fueron repelidos con gases lacrimógenos.
La sede del Congreso fue acordonada por brigadas antimotines de la policía y de la Guardia Nacional (policía militarizada) que permitieron pasar a los manifestantes a favor del proyecto y simpatizantes del Gobierno, para apoyar la sesión en la que se espera la aprobación del proyecto.
Los manifestantes, vestidos con camisetas rojas, llegaron con pancartas a la sede legislativa y dijeron que apoyan el proyecto por la democratización de la educación que propone y la apertura de la universidad a todos los sectores.
El proyecto fue aprobado en una primera discusión y se espera que pase la segunda antes de ser promulgado por Chávez, dado el dominio que mantiene el oficialismo en la cámara.
LA POLÉMICA LEY
El gobierno dijo que entre los beneficios de la nueva ley destacan el impulso de la autonomía universitaria, el análisis de los medios de prensa como cátedra, la integración familia-docente e igualdad educativa.
Mientras los manifestantes alegaban que el proyecto vulnera la autonomía universitaria y que pretende ideologizar a los estudiantes dentro del proyecto socialista del gobierno.
La marcha en apoyo al proyecto fue acompañada por el ex alcalde de Caracas y dirigente del Partido Socialista Unido de Venezuela (PSUV), Freddy Bernal, quien afirmó que la oposición miente cuando dice que la ley no ha sido discutida.
"Este proyecto tiene dos años en discusión, hemos hablado con las universidades, con los rectores, con los consejos comunales. Aquí vinieron rectores, estudiantes, sacerdotes.
Esta ley la vamos a aprobar no sólo porque tenemos mayoría en la Asamblea, sino porque tenemos mayoría en el pueblo", aseveró. El cardenal Jorge Urosa pidió suspender la aprobación del proyecto hasta septiembre, cuando terminan las vacaciones escolares, al tiempo que rechazó la eliminación de la educación religiosa.
