sábado. 20.04.2024

"El centro izquierda se ha impuesto en toda Italia".Silvio Berlusconi y su partido Pueblo de la Libertad (PDL) son los grandes derrotados en las elecciones municipales celebradas en Italia. Pierden Milán y Nápoles, entre otras ciudades, después de una enconada campaña en la que el primer ministro italiano llegó a advertir de que si ganaba el centro izquierda, Milán se convertiría en una “gitanápolis islamista”.

Y el centro izquierda ganó en Milán. El candidato, Giuliano Pisapia, consiguió imponerse frente a su opositora del centro derecha, Letizia Moratti. El PDL también ha perdido la alcaldía de Nápoles, donde se han enfrentado el candidato del centro derecha, Gianni Lettieri, y del centro-izquierda, Luigi de Magistris. Además, el PDL ha perdido también en el Ayuntamiento de Cagliari; la ciudad de Trieste (norte de Italia); y el Ayuntamiento de Novara, que cambia después de diez años de Gobierno del centro derecha. "El centro izquierda se ha impuesto en toda Italia", dijo como conclusión la secretaria nacional del Partido Democrático, Davide Zoggia.

'Il Cavaliere' había presentado estas elecciones como una especie de referéndum sobre su Gobierno, después de que su imagen política se debilitara ante los cuatro procesos interpuestos por el Tribunal de Milán contra el mandatario. Berlusconi tiene abiertos cuatro procesos: el proceso 'Mediaset' y 'Mediatrade' por fraude fiscal, el juicio 'Mills' por sobornar al abogado David Mills para que testificara a su favor en otro juicio y el 'caso Ruby' por prostitución de menores y abuso de poder, el cual sacó a la luz las fiestas que el mandatario celebra en sus villas con supuestas prostitutas.

Los resultados de estos comicios han provocado que la oposición exija a Berlusconi dimitir de su cargo. El secretario del partido opositor Partido Democrático, Pier Luigi Bersani, ha subrayado que "ahora en el Parlamento hay una mayoría diferente de la que salió de las urnas y la que hay hoy en el país" y ha destacado que el Gobierno, liderado por el primer ministro, Silvio Berlusconi, “debe dimitir”.

A esta segunda vuelta estaban llamados a las urnas más de seis millones de italianos, que han tenido que votar en un total de 88 ayuntamientos, de los cuales trece son capitales de provincia, entre las que destacan Milán y Nápoles. También se han votado seis presidencias de región.

Umberto Bossi llegó a afirmar que habían perdido Milán en primera vuelta "por culpa del PDL".Las reacciones a esta derrota no se han hecho esperar. El ministro de Bienes Culturales, Sandro Bondi, ha decidido dimitir de su cargo de coordinador nacional del PDL, aunque ha asegurado que "el presidente Berlusconi debe recibir la más amplia confianza y solidaridad" y sobre todo "la absoluta e incondicional libertad de decisión y de iniciativa respecto al futuro del partido".

Por su parte, el primer ministro ha seguido las elecciones desde Bucarest (Rumanía), donde se encuentra tras celebrar un encuentro con el primer ministro rumano, Emil Boc. Preguntado por los periodistas acerca de las elecciones, el mandatario ha subrayado que "no sabe nada".

El ministro del Interior y miembro del partido Liga Norte, Roberto Maroni, ha subrayado que los resultados "son una bofetada" a su partido y que "es necesaria una reflexión". Maroni ha advertido también de que el Gobierno necesita "un impulso" o se arriesga "a no dar una respuesta al voto de hoy", aunque ha asegurado que "no cree que sea necesario" un cambio en el Ejecutivo.

Esta nueva derrota podría provocar que el partido aliado del PDL en el Gobierno, la Liga Norte, retire definitivamente su apoyo al mandatario y cree una crisis que obligue a Berlusconi a dimitir. En este sentido, el líder de la Liga, Umberto Bossi, llegó a afirmar que habían perdido Milán en primera vuelta "por culpa del PDL".

Además, el consejero municipal de la Liga Norte en Milán, Matteo Salvini, ha asegurado que "la Liga Norte ha hecho de todo y más" y que su partido ha perdido "por culpa de Berlusconi". Según ha explicado Salvini, los votantes de su partido "se han alejado de las urnas" por las polémicas "del pasado" y las declaraciones de 'Il Cavaliere' sobre los jueces, a quienes ha definido en varias ocasiones como "un cáncer que se debe extirpar".

Italia vira al centro izquierda