Irán no anulará las elecciones pese al fraude

El Consejo de Guardianes ha anunciado que las elecciones se dan por válidas alegando que “no ha habido irregularidades importantes”. El consejo ya había advertido que sólo estaba dispuesto al recuento del 10% de los votos.
NUEVATRIBUNA.ES / AGENCIAS - 23.06.2009

El máximo cuerpo legislativo de Irán ha rechazado toda anulación de la elección presidencial celebrada el 12 de junio, como pedían dos candidatos derrotados, según ha informado la televisión estatal.

"El Consejo de Guardianes de Irán rechaza la anulación de la elección presidencial del 12 de junio, alegando que no ha habido irregularidades importantes"
La decisión se conoce un día después de que uno de los candidatos derrotados, el clérigo reformista Mehdi Karoubi, repitió su petición al Consejo para que anule la elección, que según mostraron los resultados oficiales fue ganada por el presidente Mahmud Ahmadineyad.

"En lugar de perder tiempo con un recuento de algunas urnas (...) cancelen la elección", dijo Karoubi en una carta al Consejo. El moderado ex primer ministro Mirhossein Mousavi, principal contendiente de Ahmadineyad en la elección, también había pedido la anulación citando varias irregularidades.

El Consejo había dejado en claro antes que no anularía la elección, diciendo la semana pasada que sólo estaba dispuesto al recuento de un 10% de los votos. Las autoridades rechazan las acusaciones de la oposición sobre un fraude en la elección.

MÁS DE 600 RECLAMACIONES

Los candidatos derrotados han presentado un total de 646 reclamaciones sobre la elección. A comienzos de la semana, un portavoz del Consejo de Guardianes dijo que una de las quejas más comunes era que el número de votos superaba al padrón electoral en algunas circunscripciones.

Pero el portavoz, Abbasali Kadkhodai, dijo eso podría haber sido debido al hecho de que los iraníes pueden votar donde quieran y que en cualquier caso el hecho no habría tenido un impacto importante en el resultado de la elección.

El Consejo es un cuerpo integrado por 12 hombres, seis altos clérigos nombrados por el Líder Supremo, y seis juristas islámicos, que deben asegurar que todas las leyes concuerdan con la Sharia islámica y con la constitución iraní, además de tener la capacidad de vetar candidatos en las elecciones y aprobar los resultados electorales.