El presidente saliente de Costa de Marfil, Laurent Gbagbo, detenido este lunes por las fuerzas del dirigente electo, Alassane Ouattara, ha pedido el fin de los combates en una declaración televisada.
En una breve aparición en el canal de televisión TCI, controlada por las autoridades de Ouattara, Gbagbo ha lanzado un llamamiento a sus fieles para cesar los enfrentamientos, lo que se interpreta como una rendición definitiva. "Llamo al fin de la lucha", ha declarado en este sentido.
La cadena TCI ha sido la primera en mostrar las primeras imágenes de Gbagbo ya detenido, en el interior de la habitación del Hotel Golf de Abiyán. El mandatario, que se ha negado a ceder el poder pacíficamente a Ouattara -considerado por la ONU el vencedor de las elecciones-, aparece en aparente buen estado de salud y tranquilo ante sus guardianes.
DETENIDO POR LAS FUERZAS DE FRANCIA
Las fuerzas especiales francesas de la operación 'Licorne' detuvieron a Gbagbo después de entrar en su residencia en Abiyán y lo entregaron a las fuerzas del aspirante a la Presidencia, Alassane Ouattara, según informó este lunes su asesor en Francia.
"Gbagbo ha sido detenido por las fuerzas especiales francesas en su residencia y ha sido entregado a los líderes rebeldes", declaró el asesor, Toussaint Alain, a Reuters. Según diversas fuentes citadas por el canal de información continua France 24, Laurent Gbagbo se encuentra en estos momentos en el Hotel del Golfo.
"Los líderes rebeldes habían sido conducidos hasta el lugar por las fuerzas francesas que penetraron en la residencia con los carros de combate", prosiguió. "El presidente se encontraba en su despacho", agregó. El Ministerio francés de Asuntos Exteriores no ha confirmado de momento esta noticia. "No tenemos pruebas que la confirmen", indicaron fuentes del Ministerio a Reuters.
Poco antes, una columna de alrededor de 30 vehículos blindados franceses, apoyados por helicópteros, se había dirigido a la residencia de Laurent Gbagbo, después de los bombardeos efectuados ayer domingo y esta pasada noche contra el edificio por las fuerzas de la ONU y de la misión francesa 'Licorne'.
