nuevatribuna.es
21 de enero de 2011, 3:23
nuevatribuna.es | 20.01.2011
El Gobierno provisional de Túnez dio este jueves un paso decisivo para la democratización del país. En la primera reunión del gabinete interino y presionado por las protestas del pueblo que no cesan, decidió la legalización de todas las fuerzas políticas y la declaración de una amnistía general que incluirá a los islamistas del partido ilegal Enahda. Así lo anunció el ministro de Educación Ahmed Ibrahim, quien calificó la reunión de “histórica” y resaltó el consenso logrado por todos los miembros: “Estamos completamente de acuerdo”, dijo para resaltar después que “por supuesto” que “todo el mundo está incluido en la amnistía”.
A estas medidas se une la disolución del partido del presidente derrocado, Ben Alí, Reagrupación Constitucional Democrática (RCD) cuyo comité central adoptó la decisión después de que muchos de sus miembros decidieran abandonar sus filas. Entre ellos se encuentran todos los ministros, además del , el presidente interino, Fouad Mebazaa, y el primer ministro, Mohamed Ghannouchi. Cuatro sindicalistas y dirigentes opositores renunciaron esta semana a sus cargos en el nuevo Gobierno de coalición y reclamaron la expulsión de los ministros de RCD. Se da la circunstancia de que la propia RCD ordenó ayer miércoles la expulsión de sus filas de Ben Alí y de otros seis altos cargos de su régimen.
El embajador de Túnez en España, Mohamed Ridha Kechrid, aseguró este jueves en una entrevista en TVE que la “humillación” que ha sentido el pueblo tunecino por los excesos de la segunda esposa del ex presidente que “se ha enriquecido de forma insolente” y por un régimen “represivo” y “dictatorial” ha llevado a una “reacción en la calle de gran enfado”. El diplomático ha asegurado que sus compatriotas “no van a tolerar ningún tipo de humillación más” y que la solución ahora pasa por “garantizar una transición pacífica, a la española. En este sentido ha dejado abierta la posibilidad de que formen parte del nuevo gobierno miembros del antiguo régimen: “En la práctica es difícil consensuar cómo se reparte el poder entre las formaciones políticas pero estoy seguro de que lo vamos a lograr. Tiene que haber peronas nuevas, independientes, de la oposición y entre los ministros del antiguo equipo también hay personas con las manos limpias (...) En la transición española pasó igual”, ha dicho el embajador.
Kechrid ha confiado que los tunecinos “sabrán decidir en las elecciones” ante las posibilidad de que los islamistas ganen los comicios porque el pueblo tunecino “es educado, con muchos licenciados universitarios y con personas formadas en el extranjero", y añade que el ex presidente Ben Alí “justificó el sistema represivo en el miedo al extremismo, a los islamistas, y en nombre de ese miedo encarceló a políticos, periodistas... Pero nosotros hemos decidido romper con todo eso", ha subrayado.
Por otro lado, ayer se conoció que el ex presidente Ben Alí y su esposa serán investigados por corrupción por la justicia francesa.
