miércoles. 24.04.2024

El primer ministro egipcio, Kamal el Ganzouri, ha comunicado al Parlamento, en una sesión extraordinaria, que el Gobierno ha aceptado la dimisión del gobernador de Port Said, el general de División Mohamed Abdulá, y ha cesado a los dos mandos policiales responsables de los agentes desplegados en el estadio de fútbol de esta localidad por los incidentes que han dejado más de 70 muertos y un millar de heridos.

El Ejecutivo también ha destituido a todos los miembros de la Junta Directiva de la Federación de Fútbol egipcia, que, tras la tragedia al término del partido de liga entre los equipos El Ahly y El Masry, decidió anular todos los encuentros de la jornada, según ha informado el diario 'Al Ahram'.

Los directivos de la Federación serán investigados para aclarar los motivos por los que decidieron autorizar la celebración del partido a pesar de la alta probabilidad de que se registraran enfrentamientos violentos.

INTERROGATORIO A LOS 51 DETENIDOS

Por otra parte, el fiscal general de Egipto, Abdel Meguid Mahmoud, ha ordenado este jueves interrogar a los 51 detenidos por su presunta implicación en los incidentes violentos registrados en Port Said, según 'Al Ahram'. Tras realizar una visita de inspección al estadio, Mahmoud ha solicitado a todos los ciudadanos que tengan vídeos de los incidentes que los remitan a la Fiscalía General para poder esclarecer lo sucedido.

Este episodio violento, que ha sido la mayor tragedia deportiva de la historia reciente de Egipto, ha provocado la anulación de todos los encuentros de liga y sendas reuniones extraordinarias del Parlamento y del Consejo Supremo de las Fuerzas Armadas, que ha decretado tres días de luto oficial.

La Asamblea Popular egipcia (el Parlamento) ha tenido especial protagonismo el día después de la tragedia, tanto por la comparecencia del primer ministro Al Ganzouri como por la decisión de dos de sus comisiones (de Juventud y de Defensa y Seguridad Nacional), que han exigido el cese del fiscal general y del ministro del Interior, Mohamed Ibrahim, por los continuos episodios violentos que vive el país.

Crisis política en Egipto tras la matanza en el estadio de Port Said