El deán de la catedral londinense de San Pablo, Graeme Knowles, ha dimitido de su cargo en respuesta a la decisión del cabildo catredalicio de solicitar una orden judicial para desalojar el campamento de indignados levantado junto al templo hace más de dos semanas.
La salida de Knowles se suma a la del reverendo Giles Fraser, canciller de la catedral y quien también abandonó su cargado ante el temor de que cualquier medida legal pudiese derivar en incidentes violentos.
"En los últimos días, desde la llegada del campamento de manifestantes junto a la catedral, hemos estado bajo una gran presión y nos hemos enfrentado a lo que podrían considerarse problemas insalvables", ha explicado Knowles a través de un comunicado leído en su nombre. Ahora, confía en que el nuevo deán siga tratando de lograr una solución "rápida y pacífica" al conflicto.
El movimiento 'Occupy the London Stock Exchange' ha generado una crisis interna dentro de las autoridades de la catedral, uno de los símbolos de Londres y que ha permanecido cerrado durante una semana alegando razones de salud y seguridad.
Los responsables del templo no han criticado las reivindicaciones de los manifestantes sino la forma en que desarrollan su protesta, con unas 200 tiendas instaladas.