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NUEVATRIBUNA.ES / AGENCIAS - 15.6.2009

El recién reelegido presidente, Mahmud Ahmadineyad, dio una muestra de sus intenciones respecto a los informadores con motivo de la rueda de prensa que ofreció este domingo para valorar los resultados electorales. Antes de la comparecencia, Ahmadineyad se quejó ante los medios de la actitud de la prensa extranjera. Sus lamentos se tradujeron después en hechos: dos periodistas de la televisión pública holandesa, el reportero Jan Eikelboom y el cámara Dennis Hilgers, fueron detenidos en Teherán y conminados a abandonar el país mientras grababan frente a la oficina de Mir Husein Musavi. Las fuerzas del orden iraníes confiscaron además el material audiovisual grabado por los periodistas y les retiraron los permisos necesarios para desempeñar dicha labor en el país.

Previamente, dos reporteros belgas habían sido detenidos por la mañana y posteriormente liberados bajo la condición de no volver a tomar imágenes de las manifestaciones de los partidarios de Musaví que tenían lugar en la ciudad. La oficina del canal por satélite árabe "Al Arabiya" ha sido cerrada y a las agencias de prensa con servicio de televisión no pueden enviar imágenes a medios de prensa en lengua persa, como la BBC o "Voice of America", prohibidos en el país.

La BBC ha informado mediante un comunicado de que sus emisiones por satélite para Oriente Medio y Europa han sido blanco de "interferencias" por parte de Irán. "Los oyentes y espectadores de la BBC en Irán, Oriente Medio y Europa habrán notado interferferencias en su televisión y radio al sintonizar la BBC", explica en el comunicado. "Se trata de una importante interferencia electrónica de los satélites que utiliza la BBC en Oriente Medio para enviar la señal a la BBC persa en Irán". Desde la televisión británica aseguran que ya han tomado las medidas oportunas para evitar esas interferencias que, en algunos momentos, han llegado a provocar la interrupción de la señal.

También los directores de las cadenas públicas de la televisión alemana, ARD y ZDF, Thomas Baumann y Nikolaus Brender, protestaron formalmente ante el embajador de Irán en Alemania contra las restricciones impuestas por las autoridades iraníes a su cobertura de las elecciones presidenciales. Las autoridades prohibieron informar al corresponsal de la ZDF en Teherán, Halim Hosny, y a los colaboradores de éste. Al corresponsal de ARD Peter Mezger no le fue permitido abandonar el hotel en el que se alojaba, señalan los directivos en una carta al embajador Ali Reza Sheikh Attar.

Todas estas trabas a la labor de los periodistas responden a las acusaciones lanzadas durante los últimos días por Mahmud Ahmadineyad, que ha acusado a la prensa internacional de reflejar una imagen negativa y errónea de Irán y de tratar de injerir en los asuntos internos del país. Algunos corresponsales extranjeros han sido advertidos y saben que se arriesgan a ser detenidos en cualquier momento.

Este lunes, la enviada especial de TVE, Yolanda Álvarez, informa de que "Nos han pedido que nos marchemos", y asegura que en todo el país estos días se vive "una especie de estado policial y molestamos". "No podemos sacar la cámara, ni grabar, somos testigos incómodos", afirma, pero puntualiza que "la noticia no somos nosotros, sino ellos que están pidiendo libertad. Es un movimiento social sin precedentes en este país y no quieren que haya testigos".

La periodista, en declaraciones a Los desayunos de TVE, explicaba que después "han rectificado y parece que vamos a poder quedarnos hasta el jueves, que es cuando expira nuestro visado, aunque las noticias son contradictorias y en función de nuestro trabajo, nos irán dejando quedar más o menos tiempo".

Las manifestaciones están prohibidas y las comunicaciones por móvil o internet se cortan constantemente, aún así las protestas continúan en las calles de todo el país hasta altas horas de la madrugada en medio de una fuerte presencia policial.

La asociación Reporteros Sin Fronteras (RSF) ya había denunciado la "censura masiva" por el Estado iraní de la prensa, y en particular de las páginas de internet, con el objetivo de "impedir informar de los fraudes que mancharon las elecciones presidenciales". "Al tiempo que los fraudes masivos se confirman, el Estado aplica una política de propaganda y de censura para legitimar la victoria en la primera vuelta de Mahmud Ahmadineyad", afirmó RSF en un comunicado.

Reporteros Sin Fronteras informó de las páginas de internet, "próximas a los reformadores, Mir Hosein Musavi y Mehdi Karubi", que han sido “filtradas” por el Estado: Entekhab, Ayandenews, Moj Sevom, Norooznews y Ghalamsima. A ello se sumó la “masiva perturbación” del sistema de ‘sms’ "para impedir que la oposición recogiera los resultados electorales”. RSF añadió que "los medios de comunicación del Estado tuvieron que anunciar rápidamente la victoria del presidente saliente", mientras que "los sitios de internet oficiales de los candidatos que critican los resultados oficiales fueron bloqueados".

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