jueves. 28.03.2024
lobos

El Tribunal Supremo, mediante auto del 13 de Diciembre de 2018, inadmite el Recurso de Casación interpuesto por la Junta de Castilla y León contra la Sentencia del Tribunal Superior de Justicia de Castilla y León, por la cual se anulaba el Decreto que aprobaba el denominado Plan de Conservación y Gestión del Lobo en Castilla y León, en pleito promovido por ASCEL.

Es decir, que el Plan de Conservación y Gestión del Lobo en Castilla y León (2016) resulta definitivamente anulado, al consolidar el Auto del Supremo la Sentencia anterior del TSJCyL, por desestimación del Recurso de Casación interpuesto por la Junta.

Ya no cabe ninguna duda del fracaso de la política de ‘gestión’ del lobo

Debemos recordar que el Decreto por el cual se aprobó el Plan, se publicó en el BOCyL el 23 de mayo de 2016. Frente a esa disposición, ASCEL planteó Recurso Contencioso en Julio de 2016, lo cual condujo a la Sentencia del Tribunal Superior (Castilla y León) el pasado 5 de febrero de año 2018. Y frente a esa Sentencia, de un modo que ahora se confirma inadecuado, la Junta decidió interponer un Recurso de Casación sin fundamento, como ahora se lo ha recordado el Auto del Tribunal Supremo. El Supremo no hace sino recordar que si se establecen unos procedimientos, han de ser cumplidos por los administrados y -también- por las administraciones, incluso cuando las consejerías las dirijan magistrados en excedencia, como este es el caso, desde julio de 2015.

Con el segundo plan de gestión del lobo de 2016 anulado, y mientras -como medida cautelar- está suspendido igualmente el Plan de Aprovechamiento cinegético del lobo 2016-2019, a la espera de Sentencia -que ahora se antoja poco dudosa- la situación de la Junta de Castilla y León, de la Consejería de Fomento y Medio Ambiente, y de su consejero, es insostenible en materia ambiental, y especialmente, en lo que toca a la gestión de esta especie protegida.

Y es que ya no cabe ninguna duda del fracaso de la política de ‘gestión’ del lobo. Ya no es posible enmendar una trayectoria trufada de sentencias que anulan (i) los Cupos 2010-2011, (ii) los Cupos 2011- 2012, (iii) el Plan de gestión de 2016, (iv) los Aprovechamientos Comarcales del lobo de las temporadas 2015-16, además de (v) la suspensión cautelar de los Aprovechamientos Comarcales 2016-19. En el fondo, no se puede seguir sosteniendo que una especie protegida pueda ser cazada.

Sólo con el cumplimiento de las leyes europeas, españolas y autonómicas, en favor de la preservación de la biodiversidad, incluyendo aquí al lobo, habrá una salida

Y cualquier enmienda -como otras salidas al paso anteriores de la Junta- presumimos que acabará en la misma papelera. En ASCEL, haremos todo lo posible para que la gestión del lobo pase por el respeto de su papel, sin control alguno. Porque, sí alguien piensa que el Plan anterior -2008 (derogado por el ahora plan de gestión anulado) puede parchear la situación, habrá que recordar que dos sentencias del Supremo, en su momento, motivaron el actual, anulando partes cruciales del anterior. O de otro modo, la ‘gestión’ del lobo de la Junta de Castilla y León está en un callejón sin salida.

Sólo con el cumplimiento de las leyes europeas, españolas y autonómicas, en favor de la preservación de la biodiversidad, incluyendo aquí al lobo, habrá una salida. De ello podríamos tratar con el siguiente gobierno de la Junta de Castilla y León, convencidos de que que estará ausente el señor Juan Carlos Suárez- Quiñones y Fernández, de quién ya no nos molestamos en pedir la dimisión o el cese. Le agradecemos los servicios prestados.

El Supremo anula definitivamente el Plan de gestión del Lobo en Castilla y León