Un aspecto muy controvertido de este proyecto de ley ha sido el de las bolsas de plástico que se utilizan con fines comerciales. La norma, que a partir de ahora pasará a tramitarse en el Senado, señala que el 60 % de las bolsas serán sustituidas por biodegradables antes de 2013, el 70 %, en 2015 y en 2016 deberán ser el 80 %, para finalmente desaparecer totalmente en 2018, a excepción de aquellas destinadas a contener pescado, carne u otros alimentos perecederos, para las que se establece una moratoria que será revisada en su momento.
El PP ha intentado reducir el coste del reciclado a los comercios, para ello planteaba instar a los ciudadanos a utilizar el 'contenedor amarillo' destinado a los residuos domésticos de plástico y envases para las bolsas, en lugar de llevarlas a las tiendas para introducirlas en la cadena de reciclaje, algo que respondería a algunas de las reclamaciones de los pequeños comerciantes.
El PSOE ofreció al PP pactar una enmienda transaccional para que la implantación del calendario pudiera hacerse mediante el establecimiento de acuerdos con los sectores afectados y que se realizaran "campañas de sensibilización e información al ciudadano".
La portavoz del PP en la Comisión de Medio Ambiente, María Teresa de Lara, ha rechazado esta propuesta por "irrelevante" y ha aducido que la regulación que plantea el Gobierno supone un "grave intervencionismo en la actividad económica que tendrá graves consecuencias en el empleo y en las empresas dedicadas a la fabricación de bolsas".
Por su parte, Ecologistas en Acción ha criticado la "escasa ambición" del proyecto de Ley de Residuos y Suelos Contaminados y ha alertado de que "fomenta la cultura de usar y tirar".
Para los ecologistas, la nueva normativa "no aborda realmente las causas del aumento de la cantidad de residuos ni establece ninguna medida concreta para reducirlos", cuando, a su juicio, la reducción "debería ser el pilar de toda nueva normativa de residuos en un mundo donde los recursos son cada vez más escasos".
Asimismo, afirma en un comunicado que ley fija unos objetivos de reciclaje y reutilización "muy limitados, olvidando las ventajas ambientales, económicas y sociales que aporta el reciclado". Así, recuerda que un reciente estudio de la Unión Europea concluye que se podrían crear 500.000 empleos si se reciclara el 70 % de la basura municipal.
Sobre el aprovechamiento de la materia orgánica, critica que se obligue a recogerla limpia en origen "ni siquiera a grandes productores, ni a tratarla mediante compostaje o digestión anaerobia para producir abonos naturales de buena calidad". También lamenta que la nueva ley no contemple volver al sistema de envases retornables, "una solución de probada eficacia para reducir drásticamente la cantidad de envases en circulación".
En cuanto a la solución al tema de las bolsas de plástico, Ecologistas en Acción, advierte de que "el 'lobby' del plástico" ha conseguido que la distribución gratuita de bolsas de un solo uso pueda seguir hasta el año 2018, "con la ridícula excusa de que se van a incrementar los niveles actuales de reciclado". "Desgraciadamente, las bolsas de plástico de un solo uso no se reciclan porque es mucho más barato hacer una bolsa nueva”.
