El Tribunal Superior de Justicia de Andalucía (TSJA) celebrará el próximo martes una vista judicial con el hotel de El Algarrobico como protagonista. Se escuchará a las partes, entre ellas Ecologistas en Acción, para analizar la legalidad de la licencia municipal de obras. Después de repetidas decisiones condenatorias de los máximos tribunales del Estado y de la paralización de las obras, la sentencia podría marcar el final definitivo de esta construcción en la costa de Carboneras, en el Parque Natural Cabo de Gata-Níjar. Su derribo pondría punto final a una lucha de años contra el paradigma de la destrucción del litoral y el desprecio por los espacios naturales que marcaron la burbuja inmobiliaria.
La vista se celebrará en Granada después de sucesivos retrasos. En juego está el recurso presentado contra la sentencia de un juzgado de Almería, que declaraba nulo el permiso de construcción de este hotel de veinte plantas, 411 habitaciones, instalaciones deportivas y comerciales y hasta un helipuerto a pie de playa. Comparecerán en esa vista representantes de Ecologistas en Acción, Salvemos Mojacar, la Junta de Andalucía, la Delegación del Gobierno, la constructora Azata del Sol y el Ayuntamiento de Carboneras.
No es la primera vez que el TSJA se ocupa de este proyecto megalómano. En 2012 declaró "espacio protegido no urbanizable" el sector de paraje de El Algarrobico para evitar que se pudiera reactivar el "uso turístico" del establecimiento con la normativa medioambiental aprobada en 2008 por la Junta de Andalucía para el Parque Natural de Cabo de Gata.
Se han dictado cerca de una veintena de sentencias claramente condenatorias. Algunas de ellas de tribunales superiores como la Audiencia Nacional y el Supremo, que declaró la ilegalidad del hotel por invadir de forma parcial los 100 metros de servidumbre del dominio público marítimo-terrestre que establecía la Ley de Costas recientemente derogada.
El hotel -que empezó a levantarse en 2003, en pleno boom inmobiliario- permanece vacío y paralizado por orden de otro juzgado almeriense. Pero su derribo no se ha hecho efectivo hasta el momento. La batería de recursos y la falta de voluntad política ha impedido que el disparate a pie de playa sea demolido de una vez. La vista que se celebra el próximo martes podría ser decisiva para que la construcción desparezca de un espacio protegido donde nunca debió levantarse.
También podría influir decisivamente en otro proceso judicial abierto por prevaricación contra el exalcalde de Carboneras, al haber seguido calificando El Algarrobico como urbanizable en el plan de ordenación .
