viernes. 26.04.2024

En estos momentos hay unos 1,8 millones de personas que viven en zonas fuertemente contaminadas

Un 26 de abril de hace 26 años se produjo la pérdida de control del reactor accidentado de Chernóbil. Los efectos de ese accidente superaron con mucho las peores expectativas sobre los efectos de un accidente nuclear. Una nube radiactiva cruzó toda Europa y contaminó severamente una extensión como la quinta parte de España. Se liberó a la atmósfera una radiactividad equivalente a 200 bombas como la de Hiroshima y Nagasaki juntas, lo que ocasionó más de 165 mil víctimas mortales hasta el momento y afectó a más de 7 millones de personas. En estos momentos hay unos 1,8 millones de personas que viven en zonas fuertemente contaminadas.

La explicación que dio la industria nuclear sobre estas terribles consecuencias es que el accidente se produjo en un país en crisis y en un modelo de reactor que no tenías las medidas de seguridad de los reactores occidentales. Sin embargo, en marzo de 2011 se produce el accidente de Fukushima en la superpotencia tecnológica de Japón y en unos reactores tipo BWR perfectamente homologados en occidente. Además, a diferencia de Chernóbil en que el iniciador del accidente era interior a la central, en Fukushima se produce por un suceso externo, lo que introduce una incertidumbre extra en los análisis sobre la seguridad de las instalaciones nucleares.

No se puede garantizar la seguridad absoluta y los accidentes nucleares pueden tener unas consecuencias tan catastróficas que lo más sensato es proceder al cierre escalonado de las centrales

Para Ecologistas en Acción la conclusión de estos dos accidentes es que no se puede garantizar la seguridad absoluta y que los accidentes nucleares pueden tener unas consecuencias tan catastróficas que lo más sensato es proceder al cierre escalonado de las centrales para vernos libres de esta amenaza y del resto de los inconvenientes de apostar por esta fuente de energía, entre los que destaca la producción de residuos radiactivos.

Además, las centrales nucleares son prescindibles puesto que la electricidad que aportan se puede sustituir por fuentes limpias, renovables, de bajo impacto ambiental. En la actualidad la producción renovable ya supera a la nuclear. España es un líder en la producción renovable y sin embargo se ve obligada a importar todo el uranio que consume y toda la tecnología de las centrales nucleares.

Ecologistas en acción pide el cierre de las nucleares en el 26 aniversario de Chernóbil