“Detrás de estas muertes está la precariedad, la intensificación de los ritmos y las cargas de trabajo, la desregulación de las relaciones laborales que ha generado la reforma laboral y las conductas irresponsables de algunos empresarios”, advierten UGT y CCOO de Madrid
Este martes, un trabajador falleció y otros once resultaron heridos, dos de ellos graves, tras derrumbarse parte del forjado en las obras de remodelación del hotel Ritz en Madrid.
Con esta muerte, se eleva a 54 el número de trabajadores fallecidos por accidente de trabajo en la comunidad.
Los sindicatos convocaron este miércoles una concentración de protesta por la tragedia ocurrida en las obras de rehabilitación del hotel sito en la madrileña plaza de Cibeles.
El mes de agosto ya confirmó el aumento de la siniestralidad laboral según datos aportados por UGT Madrid con un balance de 4 trabajadores muertos en jornada de trabajo y 1 en accidente in itinere.
Los sindicatos también denuncian que siguen incrementándose las patologías no traumáticas tanto graves como mortales (derrames cerebrales, ictus, infartos de miocardio…), y los accidentes de tráfico tanto mortales como graves: “Ambos indicadores están directamente relacionados con el aumento de actividad económica, aparejado a la precarización de las condiciones de trabajo”, señala UGT.
Susana Huertas, secretaria de salud Laboral de UGT Madrid afirma que “el aumento de la actividad económica en todos los sectores de nuestra región es una muy buena noticia pero si no se traduce en inversión en prevención de riesgos laborales en las empresas, se convierte en una sangría para los trabajadores”.
“Detrás de estas muertes está la precariedad, la intensificación de los ritmos y las cargas de trabajo, la desregulación de las relaciones laborales que ha generado la reforma laboral, pero tampoco tenemos que olvidar las conductas irresponsables de algunos empresarios”, señalan UGT y CCOO de Madrid en un manifiesto.
Ambos sindicatos insisten en la necesidad de reforzar los controles a través la Inspección de Trabajo, el IRSST o la fiscalía de siniestralidad de Madrid. También subrayan la necesidad de los poderes públicos hagan cumplir la Ley de Prevención de Riesgos Laborales.
