viernes. 29.03.2024

rincon-taurinoLa Escuela Taurina de Madrid -la Marcial Lalanda, ubicada en la Casa de Campo-, ha sido distinguida con el Premio Nacional de Tauromaquia de 2015, que concede el Ministerio de Educación, Cultura y Deporte. El galardón, dotado con 30.000 euros, llega a este centro, que viene formando a aspirantes a toreros desde 1976, apenas un mes después que el equipo de Gobierno del Ayuntamiento de Madrid retirase la subvención directa, de unos 61.000 euros, con la que el centro sufragaba costes de personal y talleres hasta ese momento.

El jurado, presidido por el subsecretario de Educación, Cultura y Deporte, Fernando Benzo, ha valorado la labor que han venido desempeñando las escuelas de tauromaquia del país y, de entre todas ellas, ha optado por distinguir al centro madrileño por ser el más antiguo de la época contemporánea, por su propuesta de enseñanza y por el esfuerzo y dedicación de sus profesores y alumnos, entre los que destacan figuras del toreo como Jose Cubero “Yiyo, Julián López “El Juli” o José Miguel Arroyo “Joselito”, actual codirector de la escuela.

El centro protagonizó el debate político hace justo un mes, tras el anuncio del Consistorio de retirar parte de los fondos destinados al centro para el ejercicio 2016. Consideraban desde Cibeles que la aportación anual que recibe la escuela es desproporcionada en comparación con otras actividades culturales o deportivas de mayor demanda (actualmente, el centro ofrece formación a unos 50 aspirantes a matador de toros). En rueda de prensa, la delegada de Cultura y Deportes del Ayuntamiento, Celia Mayer, aportaba una razón más: una actividad como la que desarrolla la Marcial Lalanda, «en la que se produce maltrato animal, no debería estar financiada con dinero público». El equipo de Ahora Madrid sí mantiene la subvención de 800.000 euros para adecuar las instalaciones del centro y poder permitir la realización de eventos en la finca de Batán, donde se ubica.

La presidenta de la Comunidad de Madrid, Cristina Cifuentes, no tardó en criticar la medida -«han creado un conflicto donde no lo había», señaló-, y aseguró que su Gobierno impedirá el cierre del centro.

La Escuela, que fue declarada Patrimonio Cultural Inmaterial del Pueblo de Madrid en 2012, bajo el mandado de Ana Botella, es en la actualidad competencia exclusiva del Ayuntamiento de Madrid, que la gestiona a través de la empresa municipal Madrid Destino, después de un cambio legal que retiró la titularidad mixta entre Ayuntamiento y Comunidad que regía hasta entonces.

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