martes. 16.04.2024
montagut

Los congresos obreros en el siglo XIX constituyen un aspecto fundamental de la historia del movimiento obrero español, donde se reunían representantes de sociedades, secciones, sindicatos y federaciones de trabajadores, y donde se discutía de ideología, estrategias sindicales y/o políticas

@Montagut5 | El Congreso Obrero de Barcelona fue el primero que se organizó en España, aunque solamente reuniría a sociedades obreras catalanas. Los congresos obreros en el siglo XIX constituyen un aspecto fundamental de la historia del movimiento obrero español, donde se reunían representantes de sociedades, secciones, sindicatos y federaciones de trabajadores, y donde se discutía de ideología, estrategias sindicales y/o políticas y de aspectos organizativos.

El antecedente de estos Congresos estaría en la Junta Central de Directores de la Clase obrera, que se celebró en enero de 1855, en plena explosión del Bienio Progresista, con representantes de hasta treinta sociedades obreras, que acordaron dotarse de una organización y hasta eligieron una dirección para intervenir en los conflictos laborales ante la autoridad. Pero el fin del Bienio Progresista supuso un frenazo para las organizaciones obreras, que tuvieron que funcionar en la clandestinidad. En todo caso, en 1862 se fundaría el Ateneo Catalán de la Clase Obrera, vinculado en sus inicios con el progresismo catalán. En 1864 se avanzó con el permiso de la máxima autoridad militar en Cataluña para que pudieran funcionar con relativa facilidad las sociedades obreras. Fue la puerta a la creación de El Obrero en septiembre de ese año, periódico fundamental del movimiento obrero en Cataluña, y de La Asociación.

El Obrero estaba dirigido por Antonio Gusart i Vida. Su objetivo era defender los intereses del proletariado y luchar para conseguir el reconocimiento pleno del derecho de asociación en un sentido doble: para crear sociedades de resistencia, es decir, sindicatos, pero también sociedades de producción y consumo, es decir, para cooperativas. El Obrero nacía en el seno del universo socialista del Partido Demócrata, en esta fase en la que todavía no había una clara conciencia separada o propia de la emancipación obrera, al vincularse con los sectores más a la izquierda o progresistas del universo demócrata y republicano.

La importancia de El Obrero en esta historia del Congreso de 1865 reside en que su convocatoria surgió en el seno de sus páginas, con el fin de coordinar las sociedades obreras. El Congreso se celebró en diciembre, y reunió a representantes de 22 sociedades obreras catalanas con unos trescientos delegados, una cifra muy considerable en estos inicios.

El Congreso reclamó el derecho de asociación y reivindicó el cooperativismo. En el Congreso tuvo un destacado protagonismo Gusart. La exposición al gobierno o manifiesto se publicaría en El Obrero el día 7 de enero de 1866.

Podemos acudir a dos obras clásicas: Tuñón de Lara, Manuel (1972), El movimiento obrero en la historia de España. I.1832-1899, Barcelona, y Termes, Josep (1977). Anarquismo y sindicalismo en España. La Primera Internacional (1864-1881). Barcelona.

El Congreso Obrero de 1865