viernes. 29.03.2024

En agosto del año 2019, finalizadas las elecciones Primarias, Abiertas y Obligatorias (PASO) donde se definían las candidaturas para las elecciones nacionales, que resultaron con el triunfo del Frente de Todos que llevaron a Alberto Fernández a la presidencia de la Argentina, se difundió la realización de una reunión en la Embajada de Estados Unidos en Buenos Aires, donde además de los funcionarios de dicha delegación participaron Macri, Carrió y Vidal.

En esa reunión la derecha vernácula recibió un informe y una orden, el mensaje fue claro: por la vía de los comicios no ganaran, hay que trabajar desde ahora para deteriorar a este gobierno.

El programa de re-colonización continental por parte de EE.UU y su política de concretar golpes blandos, al decir de Gene Sharp y su famoso manual, se viene desarrollando en el continente con gran firmeza, pero con muertos en el camino, Honduras, Nicaragua, Venezuela, Bolivia, con acciones muy violentas, y donde los medios de comunicación, los poderes judiciales y las acciones desestabilizadoras legislativas lograron éxitos, como contra Lugo en Paraguay, Dilma Rouseff y Lula da Silva en Brasil y en Argentina con el triunfo de Macri en su momento o con traiciones como en Ecuador, donde no pudieron derrocar a Rafael Correa con el golpe policial pero si tomaron el poder con Lenin Moreno.

El gobierno nacional de Alberto Fernández apenas asume, se aboca a resolver el tremendo peso que representa la deuda externa dejada por la presidencia de Macri, para según su definición, encarar luego el desarrollo económico, desde ese momento empezó a recibir presiones directamente y una clara acción de la oposición legislativa con la intención de interferir en las propuestas, cosa que se disparó al decretarse, a solo tres meses de asumido el gobierno, la cuarentena para enfrentar la pandemia.

Obstaculización a proyectos como el impuesto a las grandes fortunas, rebelión de los diputados opositores a las sesiones virtuales del congreso, marchas contra la cuarentena, marchas contra medidas como fue la expropiación de la quebrada empresa exportadora Vicentin, en la que el gobierno da marcha atrás,  boicot al posible acuerdo de la llegada de médicos cubanos para reforzar la lucha contra el covid-19, campañas en los medios de comunicación hegemónicos, y ahora la huelga policial en la provincia de Buenos Aires.

El gobierno nacional y el frente en el gobierno, debería considerar, para definir su estrategia política, que no se está enfrentando solo a la coalición opositora formado por el PRO y la UCR, sino a una línea de intervención de los EE.UU, en su postura de ocupar lo que siguen definiendo como su “patio trasero”.

El actual levantamiento policial, del que aún no podemos decir cuál será su definición, se da justo 24 horas después de haber informado la gobernación de la Provincia de Buenos Aires un amplio plan de inversiones en infraestructura y aumento salarial para la policía bonaerense, por lo que queda muy claro que responde a una intencionalidad política y no a un reclamo salarial, que queda totalmente superado considerando incluso que se instalaran frente a la residencia presidencial, cortando las calles con los patrulleros y portando sus armas.

La derecha está desarrollando un claro plan de acción contra un gobierno progresista y que no es funcional a la política de Washington para el continente, porque no apoya la intervención militar en Venezuela, deslegitima al grupo de Lima, no es sumiso a la OEA de Almagro y la CIA y conforma el tibio grupo de Puebla, que al no ser funcional a la Casa Blanca incomoda a EE.UU.

El golpe militar anunciado recientemente por el ex presidente Eduardo Duhalde, (vinculado con el narcotráfico y la derecha fascista, incluso señalado como instigador de la masacre de militantes opositores a su fuerza), no fue casualidad, todo encaja en un plan orquestado, marchas, cacerolas, quema de barbijos, oposición sistemática en el congreso, y fundamentalmente la prensa liderada por Clarin, la Nación e Infobae, arma elemental en esta guerra de cuarta o quinta generación atacando al gobierno nacional.

¿Será que está en marcha un decidido golpe blando en la Argentina?

La cuarentena en Argentina se vio alterada, ya no por marchas o cacerolazos, sino por...