En la primavera de 1951 se firma en París el tratado de Constitución de la Comunidad Europea del Carbón y Acero, siendo el primer intento de acercamiento entre vencedores y vencidos de la segunda guerra mundial para la creación de una Europa Unida.
El paso más decisivo se produce en 1957 con la firma del Tratado de Roma, en el que surge la Comunidad Económica Europea. En febrero de 1986, se firma el Acta Única Europea cuya finalidad es potenciar la construcción europea.
Luchemos por una Europa necesaria, pero echando a los actuales dirigentes que han matado a la Europa solidaria
En el camino a la Unión Europea actual, es muy importante el Tratado de Maastricht de 1993, creaándose la ciudadanía europea y la libre circulación de personas. A ellos se une la creación del euro.
Fue el Tratado de Lisboa del 13 de diciembre de 2007 cuando la Unión Europea aprueba una agenda neoliberal, que es el actual vigente y que está en la raíz de la desafección general al proyecto europeo y a su actual fracaso.
Cuando se produce la caída de Lehman Brothers, es el pistoletazo del inicio de una profunda crisis económica, de las que Europa no se ha repuesto. Se llevaron a cabo una serie de políticas económicas totalmente erróneas, basadas en la austeridad, que ha provocado una catástrofe en la desigualdad social, fundamentalmente en los países del sur y este de Europa, pero que actualmente está llegando a los países centrales.
El euro significó un gran avance, pero como ya advirtieron algunos políticos y economistas, su diseño fue un error, porque para que una moneda funcione bien es necesario desarrollar una política económica y fiscal armonizada, de la cual se carece.
Nada de esto se ha hecho y en tiempos de bonanza el euro permitía la obtención de dinero fácil y barato, pero con la crisis y la falta de una política monetaria común, el euro ha sido una pesada losa al no poder tomar medidas como la devaluación, etc, que pueda atemporar la crisis.
Esto ha provocado que fundamentalmente los países del sur y este de Europa hayan sufrido una profundísima crisis, de consecuencias difícilmente evaluables ahora, aumentando la pobreza a niveles desconocidas y en consecuencia la desigualdad. En vez de ser el Estado el desarrollo de políticas sociales, lo que se ha hecho es reducirlas ante la imposición del austericio establecido por las elites europeas que dirigen la Unión Europea.
La idea de una Unión Europea que no sólo se centrara en la economía, sino que desarrollara el demos europeo, la cultura común y un estado de bienestar homogeneizado se está muriendo. La unión Europea va a tener que cambiar y esforzarse mucho si quiere sobrevivir y prosperar. Hoy la Unión Europea es un muerto viviente.
En los últimos once años todos los referéndum que se han convocado sobre la Unión Europea se ha saldado con un NO. En 2005, tanto Francia como Holanda dijeron NO a la Constitución Europea. A la cual yo también me oponía. En 2008, Irlanda dijo NO al Tratado de Lisboa, aunque otro referéndum posterior dijeron SI. Grecia en 2015 rechazó las políticas austericidas de la Unión Europea. En abril, Holanda rechaza el acuerdo de asociación de Ucrania y estamos asistiendo al referéndum sobre la permanencia británica en la Unión.
Día a día la oposición al Tratado comercial TTPI entre la Unión Europea y Estados Unidos ¿Qué está pasando en nuestra Unión Europea?
Lo que sucede es que la UE está raptada por unas elites económicas y financieras europeas, desarrollando una política que sólo defiende sus intereses, en contraposición a los intereses de millones de europeos, que no ven mejorar su situación económica y social, y con un aumento de la desigualdad escandalosa. Otro de los pilares fundamentales en una construcción coherente de la Unión Europea, que están desapareciendo cual es el caso del estado del bienestar.
La actuación de Europa en cuanto al drama de los refugiados, produce una gran vergüenza y demuestra que está Europa no sirve tal como está ahora, o se cambia o muere.
Lo mismo podemos decir en cuanto a la actuación en Grecia. Como dice la politóloga alemana Ulrike Guérot “Hemos estado dirigiendo Europa en nuestro beneficio durante cinco años, fastidiando a los llamado PIGS ¿Cómo puedes esperar solidaridad en estos momentos? La mayoría de los alemanes no se ha dado cuenta de los duro que han sido los años entre 2010-2015 para muchos países”.
Otro ejemplo de la descomposición de la actual Unión Europea es el Brexit. Es incomprensible que se permita a Gran Bretaña la discriminación laboral entre europeos en función del pasaporte.
El profesor De Grauwe dice “No digo que un Brexit fuera a ser fácil, pero mejor que estén fuera que dentro de la Unión Europea. Ahora mismo el Reino Unido ya no se conforma con no integrarse en algunas políticas sino que quiere desmontar la Unión Europea. La presión del frente euroescéptico no va a disminuir aunque gane el sí. Quizás otros querrán irse: Holanda, Hungría….. que se vayan. Quedarán los que creen que va en interés mutuo seguir en esa unión.Y, la verdad, no creo que al final a todos les interese irse”.
Como vemos, estamos asistiendo a la descomposición de una Europa, carente de líderes con ideas que tengan un mínimo proyecto, y dominado por las elites financieros que desarrollan una política que provoca rechazo en la mayoría de los ciudadanos europeos.
Europa es un proyecto, que siempre debemos defender, pero se debe avanzar hacia una sociedad solidaria y justa, donde se potencie el estado del bienestar y donde la economía se desarrolle pensando en los ciudadanos y no tanto en las multinacionales.
Luchemos por una Europa necesaria, pero echando a los actuales dirigentes que han matado a la Europa solidaria.
PD: Artículo escrito antes del BREXIT
