nuevatribuna.es
10 de mayo de 2009, 15:11
NUEVATRIBUNA.ES 10.05.2009
Pasarela Vistalegre �aunque con indumentaria informal y sin corbatas- la que protagonizaron todos los pesos pesados del PSOE con un despliegue de dirigentes sin igual. Secretarios generales de todas las comunidades y como anfitrión Tomás Gómez. Presidentes autonómicos. Candidatura al completo para las elecciones del 7 de junio, encabezada por Juan Fernando López Aguilar. Todos los ministros del gabinete de José Luis Rodríguez Zapatero. Invitados de excepción como Javier Solana e Isabel Allende. Reconocimientos a un ausente Felipe González. Y una presencia que hizo que las cerca de 20.000 personas que llenaron la Plaza de Toros del madrileño barrio de Carabanchel, ovacionaran en pie y al unísono al nuevo lehendakari: Patxi López.
El PSOE arrancó la precampaña electoral para las europeas este domingo en el mismo lugar donde en 2002 se fraguó el zapaterismo y el “cambio” que llegó dos años después. Vistalegre es todo un símbolo para los socialistas, un lugar donde -como dijo el propio Zapatero- “venimos a celebrar victorias y a preparar victorias”. Un sitio para recargar las pilas, para coger fuerzas frente a la maratón, un lugar para “renovar compromisos de futuro”, afirmó el presidente del Gobierno en uno de sus mítines más encendidos.
Con el Rock and roll del grupo Tequila, los socialistas dieron el pistoletazo de salida para una cita con las urnas en la que se juegan mucho. Se juegan la credibilidad y la confianza frente a un PP crecido por las encuestas en plena y virulenta crisis económica. La clave es la movilización y, con ese fin, el partido del Gobierno desplegará todo su arsenal ideológico empezando por desempolvar las viejas páginas de su historia, sus protagonistas y sus valores programáticos. El pasado 2 de mayo, el PSOE cumplió 130 años, un aniversario que celebró la familia socialista junto con la reciente elección de López como nuevo presidente del País Vasco. Gritos de “Viva Euskadi socialista” y “Patxi, lehendakari” se mezclaban con los aplausos y los vítores al socialista vasco que subido en el escenario �en la que fue una intervención sorpresa- quiso recordar a todos aquellos compañeros asesinados por ETA y a todos los que a lo largo de más de un siglo han luchado por sus mismos ideales, como su padre, Lalo, al que minutos antes citó con mucha emotividad Manuel Chaves.
La llegada al poder del PSOE en el País Vasco ha supuesto una bocanada de aire al partido y un empujón para movilizar a su electorado. Acicate también será el PP y sus principales exponentes que el PSOE ya ni siquiera sitúa en Mariano Rajoy sino en José María Aznar, Esperanza Aguirre y el cabeza de lista a las europeas Jaime Mayor Oreja, blanco de todas las críticas del PSOE. La “derecha reaccionaria”, como la calificó Tomás Gómez; “la derecha que está a la retaguardia de Europa”, dijo López Aguilar; “el partido del no”, apunto Chaves; “la derecha más derecha de toda la UE”, sentenció Zapatero en su intervención, que también acusó al ex presidente del Gobierno de intentar apropiarse de la victoria en Euskadi.
Los socialistas no dejaron pasar la oportunidad de citar la trama de corrupción que salpica al PP y que tiene en Madrid uno de sus principales núcleos. “Un PP sospechoso” afirmó el líder del PSM que vaticinó la victoria de su partido en 2011. “Están metidos hasta el cuello”, se desahogó el flamante vicepresidente territorial. Y del caso Gürtel a las recetas neoliberales y neoconservadores que defiende Aznar, precisamente aquellas �mantiene el PSOE- que han generado la actual situación. Zapatero volvió a reiterar una vez más que la crisis no le llevará a recortar derechos sociales ni prestaciones a los trabajadores y se negó a responder al presidente de la CEOE, Gerardo Díaz Ferrán, cuando éste le culpabilizó hace unos días de la crisis: “No voy a contestarle por sentido de la responsabilidad”, dijo en tono enojado.
Encendidos discursos los de Pajín, Gómez, Chaves, López Aguilar y Zapatero. En medio de un mar de banderas del PSOE y de Europa y bajo el lema Este partido lo vamos a ganar, la secretaria de organización quiso hacer un reconocimiento especial a las mujeres socialistas y citó a la última joven que se ha afiliado en las Juventudes, Verónica, de tan solo veinte años de edad. Ánimos muy subidos y advertencias varias a los adversarios como a Rajoy, quien López Aguilar le recordó que “cada vez que se ha retado en duelo con Zapatero ha perdido”.
El PSOE arranca así una reñida campaña en la que no faltarán vídeos como el de la jornada de 65 horas que frenó el eurodiputado socialista Alejandro Cercas, una de las joyas de la corona de la candidatura del PSOE. O como el vídeo de Barack Obama, referente al otro lado del Atlántico de las políticas progresistas y ejemplo para Zapatero, que volvió a citarlo, esta vez para recordar que en leyes como el ‘matrimonio gay’ el que toma ejemplo de España es el presidente norteamericano.
Pasarela Vistalegre �aunque con indumentaria informal y sin corbatas- la que protagonizaron todos los pesos pesados del PSOE con un despliegue de dirigentes sin igual. Secretarios generales de todas las comunidades y como anfitrión Tomás Gómez. Presidentes autonómicos. Candidatura al completo para las elecciones del 7 de junio, encabezada por Juan Fernando López Aguilar. Todos los ministros del gabinete de José Luis Rodríguez Zapatero. Invitados de excepción como Javier Solana e Isabel Allende. Reconocimientos a un ausente Felipe González. Y una presencia que hizo que las cerca de 20.000 personas que llenaron la Plaza de Toros del madrileño barrio de Carabanchel, ovacionaran en pie y al unísono al nuevo lehendakari: Patxi López.
El PSOE arrancó la precampaña electoral para las europeas este domingo en el mismo lugar donde en 2002 se fraguó el zapaterismo y el “cambio” que llegó dos años después. Vistalegre es todo un símbolo para los socialistas, un lugar donde -como dijo el propio Zapatero- “venimos a celebrar victorias y a preparar victorias”. Un sitio para recargar las pilas, para coger fuerzas frente a la maratón, un lugar para “renovar compromisos de futuro”, afirmó el presidente del Gobierno en uno de sus mítines más encendidos.
Con el Rock and roll del grupo Tequila, los socialistas dieron el pistoletazo de salida para una cita con las urnas en la que se juegan mucho. Se juegan la credibilidad y la confianza frente a un PP crecido por las encuestas en plena y virulenta crisis económica. La clave es la movilización y, con ese fin, el partido del Gobierno desplegará todo su arsenal ideológico empezando por desempolvar las viejas páginas de su historia, sus protagonistas y sus valores programáticos. El pasado 2 de mayo, el PSOE cumplió 130 años, un aniversario que celebró la familia socialista junto con la reciente elección de López como nuevo presidente del País Vasco. Gritos de “Viva Euskadi socialista” y “Patxi, lehendakari” se mezclaban con los aplausos y los vítores al socialista vasco que subido en el escenario �en la que fue una intervención sorpresa- quiso recordar a todos aquellos compañeros asesinados por ETA y a todos los que a lo largo de más de un siglo han luchado por sus mismos ideales, como su padre, Lalo, al que minutos antes citó con mucha emotividad Manuel Chaves.
La llegada al poder del PSOE en el País Vasco ha supuesto una bocanada de aire al partido y un empujón para movilizar a su electorado. Acicate también será el PP y sus principales exponentes que el PSOE ya ni siquiera sitúa en Mariano Rajoy sino en José María Aznar, Esperanza Aguirre y el cabeza de lista a las europeas Jaime Mayor Oreja, blanco de todas las críticas del PSOE. La “derecha reaccionaria”, como la calificó Tomás Gómez; “la derecha que está a la retaguardia de Europa”, dijo López Aguilar; “el partido del no”, apunto Chaves; “la derecha más derecha de toda la UE”, sentenció Zapatero en su intervención, que también acusó al ex presidente del Gobierno de intentar apropiarse de la victoria en Euskadi.
Los socialistas no dejaron pasar la oportunidad de citar la trama de corrupción que salpica al PP y que tiene en Madrid uno de sus principales núcleos. “Un PP sospechoso” afirmó el líder del PSM que vaticinó la victoria de su partido en 2011. “Están metidos hasta el cuello”, se desahogó el flamante vicepresidente territorial. Y del caso Gürtel a las recetas neoliberales y neoconservadores que defiende Aznar, precisamente aquellas �mantiene el PSOE- que han generado la actual situación. Zapatero volvió a reiterar una vez más que la crisis no le llevará a recortar derechos sociales ni prestaciones a los trabajadores y se negó a responder al presidente de la CEOE, Gerardo Díaz Ferrán, cuando éste le culpabilizó hace unos días de la crisis: “No voy a contestarle por sentido de la responsabilidad”, dijo en tono enojado.
Encendidos discursos los de Pajín, Gómez, Chaves, López Aguilar y Zapatero. En medio de un mar de banderas del PSOE y de Europa y bajo el lema Este partido lo vamos a ganar, la secretaria de organización quiso hacer un reconocimiento especial a las mujeres socialistas y citó a la última joven que se ha afiliado en las Juventudes, Verónica, de tan solo veinte años de edad. Ánimos muy subidos y advertencias varias a los adversarios como a Rajoy, quien López Aguilar le recordó que “cada vez que se ha retado en duelo con Zapatero ha perdido”.
El PSOE arranca así una reñida campaña en la que no faltarán vídeos como el de la jornada de 65 horas que frenó el eurodiputado socialista Alejandro Cercas, una de las joyas de la corona de la candidatura del PSOE. O como el vídeo de Barack Obama, referente al otro lado del Atlántico de las políticas progresistas y ejemplo para Zapatero, que volvió a citarlo, esta vez para recordar que en leyes como el ‘matrimonio gay’ el que toma ejemplo de España es el presidente norteamericano.
