El sindicalista ha tachado de "insostenibles" los argumentos esgrimidos por el presidente de la Generalitat, Artur Mas, para justificar el pago de esta ayuda mediante cheque domiciliario en vez de la habitual transferencia bancaria.
Mas aseguró este domingo que sin esta modificación, que pretende descubrir a aquellos que perciben la RMI de forma fraudulenta, la administración se hubiera quedado sin dinero para pagar las prestaciones a partir de octubre.
"Es una excusa de mal pagador mezclar la partida presupuestaria con la legalidad o no de quienes reciben la ayuda", ha censurado.
Álvarez ha recordado que el nuevo Ejecutivo ha cerrado la dotación del Pirmi, hasta ahora universal, y ha apuntado a que la urgencia de control de los beneficiarios por parte del Gobierno catalán puede responder a que se les haya "disparado" la partida.
"Se han encendido todas las alarmas, Economía ha encendido las luces rojas y ahora lo que hacen es matar moscas con cañones de agua indiscriminadamente", ha deplorado.
Aunque ha rechazado que estos cambios se hayan hecho con maldad, ha lamentado que el Gobierno catalán haya contribuido a la campaña contra la inmigración "más sucia de los últimos años" y que haya situado a este colectivo en el ojo del huracán al filtrar que el 42% de los sospechosos de fraude son extranjeros.
Ha recriminado al Ejecutivo que en su momento afirmara que la rebaja del impuesto de sucesiones era "el chocolate del loro", ya que la cantidad que dejan de ingresar las arcas públicas es superior al coste de la RMI, que ahora no está garantizada.
En este sentido, ha exigido que se dé un paso atrás y se devuelva el Pirmi a su situación anterior, y ha emplazado a los consejeros a "coger el timón y hacer los deberes" para garantizar el control de los posibles tramposos sin perjudicar a quienes dependen de esta prestación para poder vivir.