viernes. 29.03.2024

La coordinadora del Comité Electoral del PSOE, Elena Valenciano, considera que el hecho de que dentro del partido surjan voces discrepantes con respecto a la reforma constitucional es algo "relativamente grave", si bien ha afirmado que lo ve "comprensible", aunque ha aprovechado para pedir "un poco de prudencia y paciencia" a todos los diputados que han mostrado su oposición a la reforma hasta que ésta quede bien definida.

"Entiendo que haya muchos compañeros que tengan dificultades para verlo, que sea una decisión que les afecte, que les resulte difícil", ha señalado Valenciano en declaraciones a RNE, tras lo cual ha subrayado que no le ha sorprendido que uno de estos diputados discrepantes sea el ex líder de CCOO Antonio Gutiérrez, ya que "no es la primera vez que discrepa de algunas de las medidas duras que ha habido que adoptar estos años".

La dirigente socialista ha justificado estas posturas dentro del PSOE por ser "un partido que debate abiertamente" y que tiene "voces plurales, distintas personalidades", aunque ha querido diferenciar estas discrepancias del apoyo al candidato a las elecciones generales, Alfredo Pérez Rubalcaba. "No tiene nada que ver con nuestro candidato y proyecto, que en estos momentos es respaldado por la totalidad del partido", ha asegurado.

Valenciano ha remarcado que la reforma de la Constitución para fijar un techo de déficit y deuda pretende "garantizar en el futuro estabilidad en las cuentas y enviar un mensaje que dé seguridad y garantías a aquellos que tienen que ayudar" a España y comprar su deuda soberana.

Aunque ha reconocido que se trata de una reforma "bien complicada", la jefa de campaña de Rubalcaba ha dicho que espera que una vez quede definida tras la negociación que se está desarrollando en el Congreso los diputados socialistas que discrepan "lo compartirán", por lo que les ha pedido "un poco de paciencia y prudencia hasta tener definitivamente la formulación".

Valenciano ha confirmado que Rubalcaba está "trabajando muy directamente con los negociadores para tratar de establecer los límites" en el cambio constitucional, así como para "intentar que se amplíe el consenso" a otros grupos parlamentarios y "no sea sólo una decisión que se adopte entre PP y PSOE".

También ha recordado lo que dijo el miércoles el propio candidato socialista, cuando explicó que la reforma se incluirá una "fórmula flexible" que permita a las administraciones públicas afrontar las situaciones de mayor dificultad económica.

Además, ha subrayado que una de las posibilidades que están barajando los negociadores es que la reforma no incluya explícitamente una cifra exacta de límite de déficit y deuda, sino que este punto se desarrolle "más despacio" después.

Rubalcaba toma las riendas de la negociación con el PP