viernes. 04.10.2024

La transparencia del sindicato con sus balances contables es fruto de una reflexión que CCOO lleva haciendo en los últimos años y buena prueba de ello es la constitución del Centro Confederal de Recursos Humanos y el Centro Confederal de Gestión Financiera

El reportaje de opinión e información que ha dedicado El País para glosar las cuentas entre 2008 y 2012 de la entonces federación de banca de CCOO (COMFIA), con un impacto tipográfico y editorial propio de las ‘exclusivas de estado’, no deja de ser un intento inconfesable de retorcer las cuentas que el sindicato ha hecho públicas y de minar su credibilidad que más tarde nos aconseja restablecer con “una decisión drástica de la dirección del sindicato”. Es el periodismo de barricada que dice corporativamente rechazar, pero que de vez en cuando abraza el rotativo de Prisa.

“Si no haces públicos los balances contables y facilitas las cuentas del sindicato serás emplazado sin miramientos a hacerlo. Si por el contrario, facilitas la información requerida esta será retorcida para cuestionar su contenido y minar tu credibilidad”

En situaciones como las ahora comentadas hagas lo que hagas recibirás el correspondiente varapalo. “Si no haces públicos los balances contables y facilitas las cuentas del sindicato serás emplazado sin miramientos a hacerlo. Si por el contrario, facilitas la información requerida esta será retorcida para cuestionar su contenido y minar tu credibilidad”, afirma CCOO. Ahora con la información ya publicada e interpretada, de poco sirven las explicaciones que ofrezcas porque ‘el medio acusador’ solo aceptará tu harakiri de complicidad con la información y opinión publicadas.

Desde hace unos años, CCOO viene acometiendo un sostenido proceso de transparencia que afecta a la publicación de sus cuentas y,  progresivamente, las de sus organizaciones confederadas. Un proceso de transparencia contable y eficiencia financiera que se ha traducido ya en la constitución del Centro Confederal de Recursos Humanos y el Centro Confederal de Gestión Financiera, y que concluirá el próximo 4 de marzo, cuando una reunión ampliada del Consejo Confederal (máximo órgano entre congresos) a la que asistirán 400 personas debata y apruebe un documento de código ético denominado: Medidas para reforzar las mejores prácticas de gobierno y control en CCOO.

Ayer la Federación de Servicios de CCOO (fruto de la fusión de COMFIA y FECOTH) salió al paso de la ‘espectacular información de portada y páginas de interior’ que El País difundió. Explicó el origen de las retribuciones, su carácter complementario y los distintos sistemas implementados a lo largo del tiempo. Informó de la transparencia de las mismas, de su tributación por IRPF, incluso con el último cambio normativo, de su cotización a la Seguridad Social, siendo de las primeras organizaciones en hacerlo. Nada ha publicado hoy El País al respecto. Eso sí, hoy El País vuelve a la carga con el importe de las dietas y viajes y acusa a CCOO de que la respuesta oficial oscila “entre lo inexistente y lo insuficiente”. Vamos, que demos las explicaciones que demos, no escaparemos a su dedo acusador.

Tanto la Dirección Confederal de CCOO como la Federación de Servicios aclaran que las cuentas siempre han sido presentadas y aprobadas en su máximo órgano de dirección; que la gestión económica ha sido buena y la organización goza de solvencia e independencia; que la antigua COMFIA siempre ha estado al corriente de pago de sus obligaciones fiscales y económicas; y que el gasto corriente de la actividad sindical y los gastos de personal siempre han estado ajustados a un porcentaje de los ingresos por cuotas. Y entonces, la pregunta que cabe hacerse es ¿a qué obedece este ataque de El País a CCOO?

¿A qué obedece el ataque de El País a CCOO?